El grupo vasco inversor, capitaneado por Ander Unzalu
Balenciaga que cuenta con los permisos en regla y con todos
los pronunciamientos favorables, balizará en los próximos
días el espacio que el Estado le ha concedido en la Bahía
norte para la instalación de sus bateas.
Tras un detallado estudio previo y con un trabajo elaborado
desde meses atrás (casi tres años) analizando posibilidades,
costos y viabilidad, la empresa registrada en Ceuta cuyo
proyecto empresarial fue presentada, a su debido tiempo ante
la Ciudad Autónoma, la Cámara de Comercio y, ante la propia
Delegación del Gobierno, puede decir que está a punto de
iniciar el cultivo de este bivalvo.
En todos los organismos la iniciativa contó con una
excelente acogida. El grupo inversor dispondrá a fin de mes
del acotamiento, por balizas, que situarán un grupo de
submarinistas ceutíes que ya han sido contratados al efecto
Ander Unzalu Balenciaga, licenciado en derecho económico por
la Universidad de Deusto; Diplomado en ‘Bussines’ por la
Universidad de Berkley y con experiencia en una de las
bancas más importantes de los Estados Unidos (Merrill-Lynch)
en St Francisco; abogado en ejercicio y colegiado en Bilbao,
es el presidente del grupo inversor que ha puesto sus ojos
en Ceuta como zona ideal para competir con Galicia y
Andalucía en el cultivo masivo del mejillón.
Informes favorables
Los inversores han llevado a cabo un profundo y detallado
estudio de mercado que han aportado junto a informes
favorables de impacto medioambiental tras el análisis
realizdo por todo un experto biólogo marino como lo es el
ceutí, Oscar Ocaña.
Creación de riqueza
Algunas empresas ceutíes han mostrado interés por la
iniciativa, y es que la instalación de las bateas a nivel
industrial crearía nuevas expectativas para la creación de
empresas dedicadas a la manufactura a la luz de la futura
producción del mejillón al natural.
Bateas
Una vez acabe la fase de balizamiento en esta próxima
semana, según las previsiones, el grupo vasco ha estimado
que a lo largo del mes de noviembre se sitúen las primeras
bateas realizadas en Galicia y que serán transportadas por
mar hasta la Bahía Norte ceutí. En ese momento, y cuando ya
se encuentren perfectamente ubicadas, se producirá la
llamada ‘siembra’ y se espera que en unos ocho meses, el
mejillón haya engordado lo suficiente como para situarlo en
unas excelentes condiciones en el mercado.
Los estudios biológicos determinan que la calidad de las
aguas ceutíes en esa zona sería calificadas como de ‘A’
(máxima escala de las consideradas).
La fase experimental, en la que nos encontramos finalizaría
en octubre de 2006. La previsión respecto de la producción
en este estadío sería de unas 500 toneladas.
El objetivo es alcanzar las 150 bateas instaladas en la
zona, la utilización de uno 15 barcos con base en Ceuta
dotados cada uno de ellos con unos 7 hombres.
Esta industria crearía unos 100 puestos de trabajo directos
y, alrededor de unos 1.500 indirectos lo que contribuiría a
erigirse como uno de los motores de la próxima economía de
la Ciudad decantada por el sector primario.
Cabe destacar, que el cultivo del mejillón arrastra como
consecuencia un desarrollo biológico extra en la zona, ya
que los expertos anuncian la proliferación de especies como
el pulpo o la nécora alrededor de las bateas, lo que
conllevaría a una futura especialización del sector de la
pesca hacia la captura de estas especies.
Si bien, la empresa ‘Mejillones y Mariscos de Ceuta S.L.’
sólo se establece para el cultivo y engorde del mejillón,
otras empresas radicadas en Ceuta podrían contar con la
opción de situar sus estrategias económicas en la
manipulación de este producto primario. Envasar (en lata o
en vacío), congelar... y a partir de ahí crear negocio desde
la misma fuente productiva, podría ser un excelente
aliciente para los nuevos inversores en este determinado
sector, dado que -además- la Ciudad Autónoma favorecerá a
aquéllos que soliciten naves industriales en la nueva zona
creada para este uso tanto en Loma Margarita como en Loma
Larga.
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