Más inofensivo que un gatito con las uñas limadas se
presentó ayer el tierno Pedro Alonso Niño de Moguer en el
coto de caza de la Unión África Ceutí, el pabellón
Díaz-Flor, donde el conjunto caballa jugueteó con su presa
desde el pitido inicial hasta darle muerte por 31-22.
El conjunto entrenado por Julio Latas, que ya ha tumbado en
su feudo a grandes felinos como el Puerto Sagunto (27-21) o
el Puertollano (31-30), necesitaba sumar su tercera victoria
en el grupo D de la Primera Estatal de balonmano después de
caer hace siete días en la cancha del EBIDEM Melilla (24-21)
y no tuvo contemplaciones con el cuadro onubense que, sirva
de anécdota, se adelantó en el marcador.
Sin embargo, el siete blanquinegro, formado de inicio por
Velasco, Munir, Dani Olivares, Pedro Bago, Ramón García,
Vendrell y Hugo Garza, apenas enseñó los colmillos y
apuntaló la defensa, empezó a abrir una brecha -surco diría
yo- que alcanzó el 9-3 mediado el minuto 20 gracias.
considerable. Ni siquiera las exclusiones señaladas sobre
Munir y Garza le sirvieron al Moguer para detener la
avalancha.
Sólo en la recta final de la primera parte, los andaluces
empezaron a soltar el brazo, pero la entrada de Fandiño en
lugar de Bago, muy por debajo de su nivel habitual, llevó al
cuadro ceutí a aumentar la ventaja máxima en el descanso
hasta los ocho goles de diferencia (15-7).
La UA Ceutí parecía que había asestado el zarpazo definitivo
al débil Pedro Alonso Niño de Moguer, pero tras la
reanudación los visitantes revivieron gracias a los tantos
de Álvaro, el artillero de su equipo con siete dianas, y a
la inconsistencia defensiva de los locales, una constante
durante el segundo período. Ambas circunstancias no sólo
impidieron que los de Latas se marcharan definitivamente en
el electrónico, sino que el cuadro de Moguer acortó
distancias y en cuatro minutos se colocó con 15-10 en
desventaja.
El torrijón de la UA Ceutí sólo encontró remedio en el brazo
de Hugo Garza, sensacional en la noche de ayer con siete
goles, quien estuvo bien secundado por Ramón García (cinco)
y Dani Olivares (cuatro).
Sin embar- go, fue en el último tercio del choque cuando los
locales metieron la quinta y dejaron la especulación para
otro día. La renta empezó a subir como la espuma, Latas dio
cabida a los suplentes, Campins se estrenó con dos tantos y
la UA Ceutí finiquitó el compromiso adquiriendo una
diferencia máxima de nueve goles al pitido final (31-22).
Con cuatro triunfos y una sola derrota en cinco jornadas, lo
que se traduce en ocho puntos en la tabla, el equipo caballa
mantiene intacto su propósito de figurar entre los favoritos
para disputar la fase de ascenso. La próxima cita será en el
feudo del UCAM Abaranera de Murcia.
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