La Liga de Primera Nacional ‘A’ de fútbol sala no está
exenta de problemas económicos, y son varios los equipos que
militan en el mismo grupo que la Unión África Ceutí, el
octavo, que están pasando momentos difíciles.
Uno de ellos es el Pino Montano sevillano, que ya se
especulaba en algún medio de comunicación que el partido, de
la pasada jornada, podría ser el último que jugase el
conjunto del distrito Norte- Macarena de Sevilla.
Tras desvincularse el Sevilla CF del conjunto de fútbol
sala, la crisis económica de la entidad se ha acrecentado
ostensiblemente, ya que ni tan siquiera han podido hacer
efectivas las fichas del equipo juvenil por falta de
liquidez.
El club sigue siendo el centro del incumplimiento de
promesas por parte de los dirigentes del Distrito Macarena,
ya que parecía que los sevillanos recibirían una cantidad
económica, durante el pasado viernes, para poder diligenciar
las fichas de su equipo juvenil y pagar el arbitraje de la
jornada, para, en fechas próximas, recibir una cantidad que
cerraría el presupuesto del club.
Pero para sorpresa de los dirigentes del club de fútbol
sala, esa cantidad no llegó. Los representantes del club se
personaron en las instalaciones municipales, donde debían
percibir el anticipo, pero recibieron un nuevo no por
respuesta y esta situación hará que se replanteen el futuro
del club.
Las primeras muestras de contrariedad las ha puesto de
manifiesto el primer entrenador y director deportivo del
club, Luis Rodríguez Olivencia, que de persistir esta
situación está sopesando la posibilidad de dejar el
banquillo, y junto con esta renuncia, abandonar también de
la dirección deportiva, porque sin apoyo no habrá categorías
inferiores, ya que, según palabras del propio técnico a
‘Información Cádiz’: “ esta situación cansa, porque nos
acompaña desde la temporada pasada y no encontramos a nadie
que nos apoye, ya que esta temporada sólo hemos contado con
la colaboración del Instituto Municipal de Deportes, y lo
más preocupante no es la falta de apoyo sino la desidia y la
indiferencia con la que se nos está tratando desde el
Ayuntamiento y que ha hecho que un equipo con aspiraciones a
ascender a División de Honor, que fue campeón de Andalucía,
en menos de una año, descienda administrativamente y tenga
que desaparecer.
La situación es límite porque las promesas puestas encima de
la mesa, el pasado miércoles, por el ex presidente de la
entidad, José Marín, y que fueron recogidas por ‘Estadio
Deportivo’, a día de hoy no se han cumplido y de no llevarse
a efecto el club tendrá que desaparecer.
En una situación muy similar está el Inmokyos 2004, el
Algeciras FS, que tras el reajuste económico hecho por el
ayuntamiento de la ciudad gaditana, trasladó su sede
deportiva a la vecina ciudad de Jerez.
Desde el pasado 22 de septiembre, el empresario jerezano
Agustín Calderón llegó a un acuerdo con Rufino Cruz,
presidente del Algeciras FS, el conjunto del campo de
Gibraltar juega sus partidos en Jerez, contando de nuevo con
otro equipo de fútbol sala, el Inmokyos 2004, patrocinador
del equipo.
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Para Juanma López la situación del Pino Montano no es una
novedad
Para el técnico local, Juanma López la situación del Pino
Montoro no es algo novedoso en este deporte: “Ha ocurrido
antes, pasa ahora y seguirá pasando en el futuro, ya que en
este deporte del fútbol sala, ningún club tiene una
estructura propia para subsistir económicamente y depende
por completo de las subvenciones municipales, y de las
firmas comerciales que patrocinan los equipos”.
El técnico del Ceutí, sabedor de la situación del club
sevillano, comentó que: “Es una pena que un equipo que
estuvo luchando por una plaza en División de Honor se vea
abocado a la desaparición, por problemas económicos”.
Los problemas del Pino Montano se remontan a la época en la
que el Sevilla FC se hizo con las riendas del conjunto de
fútbol sala: “El Sevilla firmó a jugadores galácticos, pero
las desavenencias entre los representantes de las dos
entidades hizo que el Sevilla dejara de apoyar al Pino
Montano”.
Ya la última campaña en la que el conjunto hispalense apostó
por el fútbol sala, la temporada 2004-05, su ayuda se limitó
al nombre y al material deportivo, porque en el tema
pecuniario el apoyo del club del Nervión fue bastante
escaso.
El grupo que se hizo cargo de las riendas del club no está
pudiendo hacer frente a los gastos sin las subvenciones
municipales.
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