Aunque no fueron tan estremecedores como ‘Los diez días que
conmovieron al mundo’, la archiconocida novela del
estadounidense John Reed ambientada en la Revolución Rusa,
los últimos cinco minutos del partido disputado ayer entre
la Unión África Ceutí y el Puertollano conmovieron el
corazón de los aficionados que se dieron cita en el Pabellón
Díaz-Flor. Y es que el equipo caballa, como los buenos
narradores de intriga, esperó hasta el último segundo del
encuentro para imponerse de penalti al cuadro manchego
(31-30).
Los hombres de Julio Latas, que atesoraban una ventaja de 3
a 4 goles a su favor desde el primer período, perdieron los
papeles en el tramo final y su rival, que supo sacar tajada
de la inoportuna exclusión de Hugo Garza, limó diferencias.
Con el electrónico en tablas, Pedro Bago se colgó los
galones y tomó la responsabilidad de ejecutar la pena
máxima. No le tembló la mano y suyo fue el tanto de la
victoria sobre el grupo que hasta ahora lideraba el grupo D
de la Primera Estatal de balonmano. Un espectáculo a todas
luces desaconsejable para los pacientes con insuficiencia
cardíaca.
El primer tiempo arrancó con la marcha que más le convino al
Puertollano, acostumbrado a correr la pista montando letales
contraataques. Y el marcador se disparó a su favor con un
5-8 en los diez primeros minutos, merced al acierto del
manchego Javi. Sólo los machetazos de Bago y algunas
intervenciones de mérito del portero Velasco impidieron
encajar una brecha mayor. Sin embargo, la UA Ceutí
intensificó las labores defensivas -Munir asfixió la línea
de creación del rival, que se vio obligado a jugar ataques
largos- y terminó por hacerse con las riendas del marcador
mediado el minuto 16 (11-10). En adelante, los de Latas
practicaron su mejor balonmano, el público asistió al debut
del lateral argentino Ezequiel Campins -totalmente perdido
en su primera comparecencia- y la UA Ceutí llegó al descanso
con 2 goles de renta (18-16), a pesar de haber sufrido hasta
4 exclusiones en la primera media hora.
Ya en la reanudación, el siete ceutí tuvo problemas para
despegarse del Puertollano. Con una primera línea formada
por Vendrell, Bago y Hugo Garza, Anselmo de único pivote y
Dani Olivares y Fandiño (sensacional con 7 dianas) en los
extremos), el equipo local gozó de mayor estabilidad y
alcanzó los 4 tantos de diferencia (28-24, m. 19). Pero a
falta de cinco minutos, cuando más llano se presentaba el
camino, la UA Ceutí se empeñó en verlo todo empinado: regaló
unos balones pueriles, se olvidó de mirar el arco contrario
y no tapó las acometidas de Gustavo, arrollador con 12
goles. Con esta dinámica, el Puertollano igualó restando dos
minutos (30-30) y pudo llevarse el gato al agua, pero un
penalti de película transformado por Pedro Bago quiso que
los dos puntos no volaran a Ciudad Real.
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