|
La Consejería de Sanidad inicia el diez de octubre la
campaña de vacunación contra la gripe, ya que el período de
temporada gripal abarca desde principios de octubre hasta
finales de febrero.
Esta enfermedad afectó a 2721 personas en la Ciudad Autónoma
de Ceuta el año pasado. Entre toda la población, las
personas que tienen 65 años o más constituyen el grupo de
riesgo, por lo que precisan de esta vacuna anualmente. Se
recomienda a este sector de la población que se vacunen
entre octubre y noviembre, porque es en esta época cuando se
produce el inicio de la temporada gripal, coincidiendo con
la temporada en la que el virus tiene mayor incidencia.
Enfermedad
La gripe, enfermedad vírica de las vías respiratorias, es
muy contagiosa y constituye un importante problema de salud
pública, tanto por la mortalidad que ocasiona como por sus
repercusiones sociales y económicas. La Consejería de
Sanidad quiere hacer hincapié en la importancia de la
vacunación con anterioridad al comienzo de la temporada
epidémica, ya que es la medida más efectiva para reducir el
impacto de esta enfermedad.
El virus de la gripe cambia continuamente, por eso es
necesario vacunarse cada año con este antídoto, según las
recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud.
El compuesto antigripal está elaborada a partir de virus
inactivos y fraccionados y con ella se consigue protegerse
de la enfermedad, por eso su aplicación es tan importante
para las personas consideradas grupo de riesgo.
Efectos secundarios
Este antídoto para no padecer la gripe puede producir
efectos secundarios como molestias locales ligeras, en
concreto enrojecimiento, también pueden ocasionar fiebre o
malestar pero de un modo más aislado. Lo que realmente no
puede producir es la gripe, ya que la vacuna está hecha con
virus inactivos.
Estos efectos secundarios lo sufren un porcentaje pequeño de
los vacunados, concretamente entre el 15% y el 20%.
La vacuna está contraindicada en el caso de infección aguda,
enfermedad febril o alergia a alguno de los múltiples
componentes de los que consta este método que evita la
enfermedad en muchas personas.
Complicaciones
Los individuos con mayor riesgo de complicaciones son
aquellas personas con 65 años o más, los menores de esta
edad pero que padezcan diabetes, los enfermos pulmonares
crónicos, los que padezcan dolencias cardíacas crónicas, los
hepáticos crónicos y los que se estén sometiendo a un
tratamiento con inmunosupresores. Con respecto a los
adolescentes, los que sigan un tratamiento prolongado con
ácido acetilsalicílico.
Los individuos o grupos que pueden transmitir la gripe a
personas con riesgo de complicaciones son las personas que
pertenecen al personal sanitario y no sanitario hospitalario
y ambulatorio, el de residencias de la tercera edad y los
servicios sociales de ayuda a domicilio y los contactos
domiciliarios de individuos con riesgo.
El personal de riesgo de trasmisión de esta enfermedad
también son aquellas personas que realizan servicios
esenciales a la comunidad, como la Policía, la Guardia
Civil, los militares, el Cuerpo de Bomberos, los de
Protección Oficial, incluso el personal de los transportes
colectivos y otros que ocupen puestos claves dentro de los
servicios generales de la comunidad.
Las enfermedades causadas por el virus de la gripe, el
neumococo, constituyen un importante problema de salud en
todo el mundo. Este virus puede provocar infecciones en el
pulmón (lo que se conoce como neumonía), en la sangre
(enfermedad denominada bacteriemia), en las meninges
(produce meningitis), además de ser capaz de producir
infecciones respiratorias como sinusitis y otitis. Esta
vacuna se proporciona en los centro de salud, además en este
lugar se informa de las consecuencias que tendría
contagiarse del virus.
|
SANIDAD / PREVENCIÓN
