El delegado del Gobierno en Ceuta, Jerónimo Nieto, informó
ayer del desmantelamiento de los campamentos de inmigrantes
subsaharianos instalados en los alrededores de la población
marroquí de Beliones. La incursión militar llevada a cabo
por las fuerzas del país vecino ha provocado un efecto de
terror entre los irregulares que pretendían acceder a la
Ciudad Autónoma a través del perímetro fronterizo, según
explicaron ayer vecinos de la zona, pues “temen las
consecuencias de ser atrapados mientras preparan una nuevo
asalto al perímetro fronterizo”.
Asimismo, las fuerzas marroquíes han extremado también la
precaución en la zona y prestarán efectivos a labores
conjuntas como la retirada de la vegetación que dificulta la
vigilancia en algunos puntos de la zona internacional que
separa el vallado fronterizo de España y Marruecos.
Servicios de Información
Junto a las labores de vigilancia, las células de
inteligencia de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del
Estado se encuentran en estado de alerta ante potenciales
avalanchas de inmigrantes ilegales desde el otro lado de la
frontera, según informó ayer Jerónimo Nieto en rueda de
prensa. La acción policial pretende lograr resultados en
materia de previsión, de manera que tanto las autoridades
españolas como las marroquíes se mantengan informadas y
preparadas para frenar cualquier imprevisto en el perímetro.
Junto a los servicios de información desplegados en el norte
de Marruecos, tras el último incidente registrado en la
Ciudad Autónoma de Melilla, la Administración General del
Estado concentra sus efectivos en tareas de persuasión, para
lo cual ha extremado la vigilancia en los perímetros
fronterizos, tanto con un incremento notable de efectivos
como con la incorporación de alta tecnología militar que
perfecciona las labores humanas, de ambas ciudades
norteafricanas para frenar potenciales brotes de inmigración
irregular de subsaharianos
|