El Tercio Duque de Alba segundo de la Legión, formado
principalmente por militares de la guarnición de Ceuta,
dirige las tareas que las Fuerzas Españolas desarrollan en
Bosnia y Herzegovina desde el pasado día 20 de septiembre,
en el marco de la operación Althea que está coordinando la
Unión Europea.
La Comandancia General de Ceuta tomó por vez primera el
mando de las Fuerzas Españolas para mantenimiento de la paz
en el país balcánico, integrando la SPFOR XXVI (Fuerza de
Estabilización) española, que dio relevo a la agrupación
anterior, SPFOR XXV, con base en San Clemente de Sansebas,
Girona.
El acto de transferencia de autoridad, celebrado en la base
‘Europa’ de la ciudad de Mostar, estuvo presidido por el
general de Brigada del Ejército Español, Benito Raggio
Cachinero, y el general de Brigada segundo jefe de la
Comandancia General de Ceuta, Fernando Carbonell Sotillo.
Siguiendo el protocolo militar, el general jefe pasó revista
a la agrupación y tras la lectura de la fórmula se llevó a
cabo la transferencia de autoridad entre el coronel
Santaeufemia Fernández, jefe de la guarnición anterior, y el
teniente coronel Ortiz Díaz-Hellín, jefe de la SPFOR XXVI y
destinado en el Tercio Duque de Alba segundo de la Legión.
Es la primera vez que el mando y gran número de los
componentes de la fuerza española desplazada a Bosnia y
Herzegovina está formada por miembros de las unidades
destacadas de la Ciudad de Ceuta.
La agrupación SPFOR XXVI está constituida por 433 militares,
333 hombres y mujeres del Ejército de tierra y 100 de
Infantería de Marina, procedentes de Ceuta y de la localidad
gaditana de San Fernando.
La operación ‘Althea’ de Fuerza de Estabilización forma
parte del planteamiento global de los importantes
compromisos que la Unión Europea mantiene ene l área
balcánica. La operación militar nació con el objetivo de
ayudar a Bosnia y Herzegovina a enfrentarse a los nuevos
retos que pudieran surgir en el camino a su integración en
Europa.
A continuación se llevó a cabo un acto de homenaje a los
caídos, en conmemoración de los veinte militares y un
intérprete fallecidos en misión de paz en el territorio
bosnio. Durante la celebración se depositó una corona de
laurel en la escultura dedicada a las víctimas, situada en
el patio central de la base ‘Europa’.
|