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La Federación de Servicios Públicos de UGT-Ceuta (FSP-UGT)
mostró ayer su conformidad con el nuevo Plan de
Infraestructuras Penitenciarias aprobado por el Consejo de
Ministros el pasado 18 de noviembre y que incluye la
construcción de un nuevo centro penitenciario en la Ciudad
Autónoma así como un centro de inserción social en régimen
abierto (CIS).
Según explica delegado sindical de UGT-Prisiones y
presidente de la Junta de Personal de los funcionarios del
Estado en Ceuta, Juan Miguel Cubo, la creación de un centro
de inserción de estas características “era uno de los
objetivos aprobados en el pasado congreso de FSP-Ceuta” y
permitirá que los internos en situación de tercer grado
(semilibertad) puedan desarrollar su vida laboral y familiar
en mejores condiciones.
El Plan contempla la construcción de 74 nuevos centros
repartidos en 15 instalaciones penitenciarias, 32 centros de
inserción, tres de rehabilitación, cinco módulos de madres y
19 unidades de custodia hospitalaria. Para ello, la
Administración General del Estado desembolsará un montante
de 3.156 millones de euros de los que 1.500 ya están
aprobados y los 1.645 restantes se aprobarán de forma
paulatina hasta el año 2012. Asimismo, Cubo destaca como
aspecto fundamental del nuevo Plan Penitenciario el
importante incremento de puestos de trabajo que llevará
asociado.
En opinión del sindicalista, estas medidas suponen “un
importante avance para paliar la penosa situación de las
prisiones españolas”, por lo que insta al Ministerio de
Interior a acometer “otras actuaciones que soluciones de
manera definitiva la masificación que presentan los centros
penitenciarios”.
La construcción de las nuevas instalaciones carcelarias es,
según la Administración General del Estado, una necesidad
urgente ante el notable aumento de la población
penitenciaria, que se ha incrementado un 33,4 por ciento
entre 1996 y 2004 en los 66 centros gestionados por la
Dirección General de Instituciones Penitenciarias
dependiente del Ministerio de Interior. Esta circunstancia,
unida a la caída del ritmo de inversión y construcción,
especialmente entre 2000 y 2004, ha traído como consecuencia
una notable sobreocupación de las cárceles de todo el
territorio nacional.
Escasez de suelo
Una vez aprobadas las cuantías económicas destinadas a la
construcción de los nuevos centros, la Administración
General del Estado estudia junto a la Ciudad Autónoma la
ubicación del próximo centro penitenciario de Ceuta. La
abrupta orografía que presenta el mapeado local supone la
principal traba para ubicar las instalaciones, que requieren
una amplia superficie para su construcción. Asimismo,
también queda por determinar la ubicación del CIS y
proyectar nuevas funciones para el viejo edificio de ‘Los
Rosales’.
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