La mercancía voluminosa es una de las causas de las
aglomeraciones en el paso del Biutz. Así lo expresó ayer
Francisco Alcaide, portavoz de los comerciantes del polígono
del Tarajal. Para Alcaide -quien explicó que ayer había sido
un día “fluido”- el transporte de “grandes bultos”, que se
entremezclan con las mercancías pequeñas, (textiles, por
ejemplo) impide en muchas ocasiones que el flujo de personas
que atraviesan a diario el paso sea más continuo. Cosa que
no ocurrió ayer, entre otras cosas porque todavía no se ha
retomado en la zona la actividad cotidiana después de la
celebración del fin del Ramadan, unos días que Alcaide ha
calificado como “un suplicio” por la falta de ventas. Por
otro lado, Alcaide manifestó que todavía no comprenden el
por qué del cambio de la hora de cierre del paso: antes era
a la una y ahora, a las doce. “Nos perjudica porque
trabajamos una hora menos”, señala el portavoz quien añade
que no existe una explicación oficial al respecto. “Ni lo
criticamos ni lo alabamos pero no conocemos la razón”,
concluye. Por otro lado, Francisco Alcaide enumeró otros
problemas que, a su juicio, dificultan la actividad en el
polígono del Tarajal. Uno de ellos: la limpieza de la zona,
aunque señala que desde la Ciudad “ya se está luchando sobre
este tema”. Alcaide apuesta por reforzar las labores de
mantenimiento, espaciando el horario de limpieza porque “por
la mañana está todo limpio” pero las basuras se van
acumulando a lo largo de la jornada laboral. El próximo mes
de diciembre mantendrán una reunión con los responsables del
departamento para ratificar las medidas ya acordadas o poner
otras en marcha. En otro orden de cosas, el asunto de las
mercancías que podrían llegar de la zona del Príncipe y
atravesar el Biutz es conocido por Francisco Alcaide y los
comerciantes del Tarajal. El portavoz señala que este tema
perjudicaría sus negocios y la organización del polígono,
siempre llena de vehículos.
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