Un hombre de 27 años ha sido condenado a una pena de cuatro
meses de cárcel por un delito de robo de uso de vehículo a
motor cometido el pasado 13 de octubre en la calle
Independencia. El suceso se produjo a las 18.50 horas cuando
el joven, que responde a las iniciales H.I., fue pillado ‘in
fraganti’ por una patrulla de la Policía Local que hacía la
ronda por dicha zona.
Según el informe policial, había dos individuos en la escena
del robo. El acusado estaba en el interior de un Renault 21
agazapado en su parte delantera y manipulando los cables de
contacto mientras que el otro hombre se hallaba de pie y
expectante junto a la puerta derecha del vehículo. La
ubicación de este último resultó sospechosa para los agentes
que, al aproximarse al vehículo descubrieron que tenía la
cerradura forzada. Al percatarse de la presencia policial,
los dos jóvenes huyeron a pie en dirección a la Plaza de
África. Saltaron por una baranda próxima a la Oficina de
Información y Turismo en la avenida de las Palmeras y
cayeron al vacío 7 u 8 metros. Al llegar a Muelle Cañonero
Dato los agentes lograron detener a H.I. pero el que le
acompañaba logró subirse a un Peugeot 307 que, según recoge
el informe de atestados, “se supone que estaba siguiendo
toda la operación para ayudar”, y huyó. Aunque se comunicó
estos hechos a los demás indicativos policiales en servicio,
no se logró su localización y, por ende, su detención.
El que si pudo ser detenido y trasladado a las dependencias
policiales fue el joven H.I., de nacionalidad marroquí y
trabajador de un taller mecánico de Benzú, aunque primero
tuvo que ser trasladado al hospital civil porque se quejaba
de un pie, resultando que, de la caída, se había fracturado
el pie derecho, por lo que tuvo que practicársele una
intervención quirúrgica.
Por cierto que tras la detención, se hallaron en el interior
del vehículo un martillo con mango de madera, dos
destornilladores y un alicate que la dueña del vehículo
confirmó que no le pertenecían.
El acusado, que carecía de antecedentes, fue procesado en la
sala segunda del juzgado de lo penal de Ceuta por el
magistrado Antonio Severo Castro quién encontró que H.I. era
el “autor criminalmente responsable del delito de robo de
uso de vehículo de motor”.
Por este motivo, porque el acusado “fracturó la cerradura de
la puerta del conductor de un Renault 21 con ánimo ilícito
de beneficio y con el fin de utilización”, H.I. fue
condenado a una pena de cuatro meses de cárcel. Además,
deberá pagar una multa de dos euros diarios de cuota durante
un periodo de quince días con responsabilidad civil
subsidiaria de un día de privación de libertad por cada dos
cuotas impagadas. La sentencia recoge también que H.I.
deberá indemnizar a la perjudicada con 900 euros por los
desperfectos causados y que también deberá hacerse cargo de
las costas procesales.
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