Un grupo de jóvenes cristianos, que formaban parte de la
rama juvenil de los Cursillos de Cristiandad, se han
desvinculados de estos Cursillos por diversos motivos,
decidiendo formar un grupo parroquial comprometido e
integrado en la parroquia de San Juan de Dios.
Tal y como destacaba a nuestro rotativo el jefe de escuela
de este grupo, Eduardo Ayala Valenzuela, este movimiento o
grupo tiene como único fin hacer llegar a los jóvenes de su
edad el mensaje de Esperanza que Jesús de Nazaret deja en su
evangelio.
En la sociedad en la que viven los jóvenes se ven envueltos
por una serie de valores superficiales como puede ser el
dinero, el triunfo social, la diversión….. y este grupo no
dice que esto no sea bueno pero afirman conocer otros
valores que quieren poner por encima de estos otros y con
ellos se dan cuenta que la felicidad es algo mas que el puro
materialismo, ya que intentan transmitir la felicidad en el
compartir con el hermano, en la caridad, en la oración, etc.
Eduardo afirma que todos en el grupo saben que van
contracorriente de la sociedad de hoy en día, pero que es
precisamente eso lo que les hace sentirse mas fuertes y
unificarse mas en Jesucristo.
Como destacaba Eduardo Ayala, uno de sus valores es la
oración por eso este fin de semana pasado comenzaron el
nuevo curso con un retiro de oración (de 24 horas) en la
Casa de Amor Fraterno, perteneciente al Obispado de Ceuta.
En este fin de semana el equipo de monitores se ha preparado
de forma espiritual para transmitir a los jóvenes de Ceuta,
a aquel amigo que un día les presentaron y del cual se
enamoraron como es Cristo, afirmando que el es el amigo que
nunca falla. Y convencido de lo que dicen realizan
convivencias juveniles por las que han pasado ya cientos de
jóvenes de nuestra ciudad.
Este año realizarán una sobre el mes de marzo para jóvenes
de 16 a 21 años en la que esperan que ese mensaje y ese
aliento de Cristo se haga presente en esas jornadas a través
del Espíritu Santo.
Con este retiro de fin de semana que ha inaugurado el curso,
ahora solo les queda por delante mucho trabajo y formación,
por lo que para ello cuentan con la ayuda del párroco de San
Juan de Dios, Juan Enrique que semana tras semana se encarga
de formarles en nuestra fe, y también cuentan con un grupo
de oración en el cual todos los viernes a las 22.30 de la
noche se reunen para mantener un encuentro de oración en el
que puedan encontrar un acercamiento a Cristo y una paz
interior que solo la oración se la puede dar.
Eduardo Ayala aprovechó este rotativo para invitar a todo
aquel joven que quiera, a acercarse y compartir con ellos
ese momento.
En total son 21 los que forman la escuela, dentro de esta
existe un secretariado que es el que coordina la preparación
de las convivencias. Este, está formado por seis áreas:
- Director Espiritual: Juan Enrique Sánchez Moreno, Prov.
- Jefe de Escuela: Eduardo Ayala Valenzuela
- Coordinadora de Pre-Convivencia: Cristina Puchol Chicon.
- Coordinador de la Convivencia: Jorge Ayala Valenzuela
- Coordinadora de la Pos- Convivencia: Estefanía Viso
González
- Coordinador de Oración: Denis González Recio
El director espiritual es el que rige la formación teologal
dentro de la escuela, y prepara el temario a impartir.
El jefe de escuela es el que se encarga de dinamizar la
formación impartida y de controlar todas las áreas para que
cada una trabaje en su cometido.
La coordinadora de la Pre-convivencia es la encargada de
realizar el listado de jóvenes que van a asistir a las
jornadas, viendo que estos estén dentro de la edad
permitida, etc.
El coordinador de la convivencia se encarga de toda la
infraestructura para las jornadas desde el material
didáctico pasando por la alimentación, transporte, etc.
La coordinadora de la Pos-convivencia es la encargada de
realizar un seguimiento de los jóvenes después de dichas
jornadas puesto que este grupo los invita a integrarse en
las diferentes parroquias de nuestra diócesis de Ceuta
participando de los grupos juveniles ya existentes o de los
grupos de confirmación, coros, etc.
Y por ultimo el encargado de oración es el que se encarga de
realizar todas las oraciones que se realicen tanto en la
escuela de formación como en dichas jornadas, siendo siempre
oraciones participativas y dinámicas para jóvenes casi
siempre amenizadas con cantos.
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