Alrededor de 400 personas recorrieron ayer Ceuta en la
denominada caravana contra la valla para protestar contra
“las políticas fronterizas actuales”. Procedentes de
diversos puntos de España, los manifestantes llegaron a la
ciudad por la mañana, procedentes del puerto de Algeciras.
Bajo el lema Ninguna persona es ilegal, hicieron a pie el
camino entre el puerto, el perímetro y el CETI.
La marcha, que hoy abandona la Ciudad, ha sido organizada
por diferentes asociaciones, colectivos de vecinos y foros
de inmigrantes peninsulares. La única participación ceutí la
protagonizó Mohamed Ali Mohamed, responsable de la Unión de
Musulmanes de Ceuta. La manifestación llegó al perímetro
fronterizo ceutí donde realizó un acto de homenaje a los
inmigrantes subsaharianos fallecidos en septiembre. Por la
tarde, llegó a las instalaciones del Centro de Estancia
Temporal de Inmigrantes, cerca de la zona donde se
acomodaron las tiendas de campaña donde los manifestantes
han pasado la noche.
El grupo llegó a la Ciudad en el barco de las diez desde
Algeciras. Nada más llegar al puerto ceutí, comenzó el coro
de proclamas en favor de la regularización de los
inmigrantes que se encuentran en España y la condena a las
políticas de gestión fronteriza de España y Marruecos. Desde
hace un par de días, un grupo de ocho personas de la red de
organizaciones ha permanecido en Ceuta con el objetivo de
señalar el recorrido concreto de la marcha y tramitar la
cuestión administrativa.
Hacia la frontera
El colectivo, organizado en comisiones de trabajo, partió
hacia el perímetro sobre las doce de la mañana, después de
haber distribuido pancartas y carteles. Acompañaba a los
manifestantes un vehículo de la Policía Local que abría el
paso. La presencia de las fuerzas de seguridad fue constante
a lo largo del recorrido. En tareas de regulación del
tráfico, los agentes locales establecieron puntos de control
tanto en los cruces como a lo largo del trayecto; la
presencia fue extensible a Policía Nacional y Guardia Civil
y miembros de la marcah estuvieron en contacto continuo con
la Delegación del Gobierno. La comitiva recorrió la zona
marítima, los jardines de la Argentina, bajo el puente de la
Barriada de Juan XXIII- donde fueron increpados por algunos
ciudadanos- y accedieron a la zona del vallado a través de
las naves del polígono del Tarajal. Allí manifestaron de
nuevo su rechazo a la “vulneración constante de los derechos
humanos en la frontera”. La Guardia Civil que custodiaba el
área fronteriza dio paso a cinco representes de la red
organizativa que accedieron hasta la valla, donde colocaron
flores en recuerdo de los fallecido en las llegadas masivas
de septiembre y una pancarta con el lema: Tumba la valla.
Sólo al final del recorrido hasta el perímetro se sumaron a
la marcha algunos ciudadanos ceutíes. Los manifestantes
dirigieron gritos contra los agentes de la Guardia Civil
presentes en la zona, aunque el acto se llevó a cabo sin
incidentes. A continuación se dirigieron hacia el CETI.
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Hoy, manifestación hasta la sede de la Delegación de
Gobierno
La caravana tiene hoy previsto
llegar en manifestación hasta la sede la Delegación de
Gobierno a las dos de la tarde. Ayer por la noche aún
continuaban negociando con miembros del organismo para
definir hora e itinerario. Ayer, durante su protesta en el
perímetro emplazaron al delegado del Gobierno, Jerónimo
Nieto, a que estuviera les atendiera a su llegada. Nicolás
Sguiglia, responsable de comunicación de la red de
asociaciones, señalaba ayer que la intención de
entrevistarse con Nieto era firme porque deseaban plantearle
en primera persona todas sus demandas. Las principales: el
cese de las deportaciones y conocer el futuro de los
subsaharianos que permanecen en Ceuta y Melilla. “Pedimos
una amnistía para que se regularice a todos los inmigrantes
de las dos ciudades, tras el dolor que han padecido”,
concluyó este miembro de la caravana contra la valla.
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