La AD Ceuta ha mostrado en la primera vuelta, aunque aún
faltan dos jornadas para llegar al ecuador de la
competición, dos caras bien diferenciadas: en defensa el
equipo de Calderé ha realizado un trabajo positivo y sólo ha
encajado 12 goles en 17 partidos, a pesar de recibir seis
tantos en las primeras cuatro jornadas del Campeonato por la
falta de acoplamiento entre las líneas, cierto desorden en
el campo por el ansia de buscar la portería contraria y
errores garrafales individuales que costaron goles y puntos,
mientras que con el balón en los pies los caballas no han
generado excesivo fútbol, pero sobre todo dieron muestras
evidentes de falta de pegada, de punch en los últimos
metros. Calderé, que se quedó sin un ‘nueve’ puro en su
plantilla al marcharse Basti al Albacete y no convencer a
nadie su sustituto, el francés Bolou, que jugó dos medias
partes ante el Mérida y el Cartagena antes de regresar a su
país, lo intentó todo con los pocos delanteros que le
quedaban y situando a la desesperada a Guri y David Franch
en la posición de ariete. Ni con el 4-4-2 ni con el 4-3-3 el
Ceuta vio puerta quedándose en ocho de los 17 partidos
disputados sin marcar. Los blancos presentan el peor
registro en el grupo IV con 12 goles y si están fuera de las
posiciones de descenso directo es gracias a su solvencia y
eficacia defensiva. Sólo el colista, Díter Zafra, ha marcado
también 12 tantos, pero los de Rafa Rincón Rus son el equipo
que más goles recibe de largo, 35 en 17 partidos, y con 9
puntos sumados lo tienen crudo para evitar el descenso de
categoría. Un gol más que el Ceuta han conseguido el
Badajoz, el Almansa y la UB Conquense y dos más el
Algeciras, que es penúltimo porque vio perforada su portería
en 25 ocasiones.
Así las cosas, este Ceuta funciona en defensa con un
portero, Garikoitz Basauri, experimentado y que atraviesa un
gran momento de forma, una zaga sobria donde Cerveró, Guri,
Sandro y Juanma se han consolidado como el cuarteto titular
si las lesiones y las sanciones respetan a estos futbolistas
y un centro del campo trabajador y que tiene calidad, aunque
quizás se eche en falta la figura de un medio organizador
que ayude a Platero en la creación y permita al algecireño
jugar entre líneas para conectar con los delanteros o
sorprender llegando desde atrás, a Platero hay que pedirle
por experiencia, talento y capacidad de liderazgo que ‘tire’
de su equipo en los momentos delicados de los partidos
siempre que juegue en la mediapunta, su posición natural. El
algecireño no rinde pegado en banda ni como delantero centro
porque carece de ‘instinto asesino’.
El gran problema de este Ceuta es su falta de gol, que lo ha
convertido en el ‘rey del empate’ y provocó que hasta
¡dieciséis! puntos volaran del Alfonso Murube. Si echamos la
vista atrás y comparamos los goles marcados esta temporada
con los conseguidos en los siete ejercicios anteriores en la
jornada decimoséptima, llegamos a una conclusión: este Ceuta
es el que tiene menos gol. En las campañas 98-99 y 99-00 el
equipo ceutí había marcado 20 goles, en la 00-01, 25; en la
01-02, 19; en la 02-03, 16; en la 03-04, 21 y la pasada
temporada, 20 goles.
En cambio sólo el Ceuta de Terrazas con 7 goles y el de
Carlos Orúe con 11 habían encajado menos goles que el de
Ramón María Calderé en este tramo de la competición.
La plantilla ceutí regresa esta tarde a los
entrenamientos
La plantilla del Ceuta reanuda esta tarde los entrenamientos
después de disfrutar de nueve días de vacaciones
aprovechando el parón de la competición por la Navidad. El
equipo de Ramón María Calderé, que incidirá esta semana en
aspectos físicos y trabajará algunos días en sesión de
mañana y tarde, vuelve al tajo sin que la directiva que
preside Ernesto Valero haya anunciado aún los anhelados
refuerzos. El entrenador caballa, que dio antes de las
vacaciones la lista de bajas compuesta por Lucas Cominelli,
Sergio Tejero y Sergio Molina, espera como agua de mayo la
llegada de dos delanteros contrastados para paliar el
déficit goleador del Ceuta esta temporada.
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El Talavera, en línea ascendente
El Talavera CF, el primer rival
del Ceuta en el Año Nuevo, afrontará su visita al Murube el
próximo 8 de enero en el mejor momento de la temporada. Los
talaveranos, que arrancaron muy mal al sumar un sólo punto
en las primeras cuatro jornadas en las que cayeron dos veces
en ‘El Prado’ ante el Cartagena y el Sevilla ‘B’ por un gol
a dos, consiguieron su primer triunfo el 23 de septiembre
cuando sorprendieron al Córdoba en el Nuevo Arcángel al
derrotarlo por 2 goles a 3, pero este meritorio triunfo no
tuvo continuidad y el grupo de Miguel Ángel Iglesias empató
los tres partidos siguientes ante el Linares, Alcalá y
Conquense y los tres a cero.
El equipo toledano seguía sin ganar en casa y pese a su buen
rendimiento a domicilio no escapaba de la zona de descenso.
Pero las tres victorias enlazadas entre la jornada duodécima
y la decimocuarta cuando el Talavera venció a la UD Almansa
por 3-1, al Écija en el ‘San Pablo’ por 1-2 y al Villanueva
en ‘El Prado’ por 2-1 supuso un punto de inflexión en la
trayectoria del conjunto blanquiazul en la Liga. Los
jugadores de Iglesias han mejorado sus prestaciones en
ataque, defensivamente son un bloque rocoso y firme, y
gracias a los 13 puntos sumados de los últimos 18 posibles
han escalado posiciones en la tabla hasta marcharse de
vacaciones en un cómodo noveno puesto con 24 puntos.
Subrayar que el Talavera ha sumado más puntos a domicilio
(14) que en casa donde logró 10 y sólo ganó dos partidos.
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