La Gerencia de Atención Especializada del Ingesa de Ceuta
cerrará hoy un curso que, durante dos jornadas, ha tratado
el ámbito de la cardiología. Según señala el Ingesa, este
curso permite a los profesionales sanitarios “conocer las
técnicas y la aplicación” sobre el soporte vital
especializado.
La aplicación práctica de las jornadas relativas al ‘Soporte
Vital Instrumentalizado’ se centraría en disminuir la
mortalidad y las secuelas que pueden ocasionar las paradas
cardiacas en los pacientes; difundir las técnicas acerca del
soporte vital entre los posibles primeros intervinientes,
principalmente de carácter sanitario; contribuir al impulso
de las estrategias dirigidas a la desfibrilación temprana;
facilitar la integración de estos primeros intervinientes en
la cadena de supervivencia; y, finalmente, difundir las
normas básicas para la prevención de la enfermedad coronaria
y de la muerte súbita cardiaca.
El personal del Ingesa que ha participado en el curso que
hoy se clausura ha asistido, durante quince horas de clase
teórico-práctica, a módulos impartidos por compañeros de
área del servicio del 061. El taller que tuvo lugar ayer fue
impartido por José Luis Carpintero Avellaneda, jefe del
Servicio de la Unidad de Vigilancia Intensiva del Hospital
Universitario Virgen de la Victoria de Málaga. La
coordinación general de las jornadas ha corrido a cargo de
José Vergara.
Previsión de horarios
El Ingesa ha previsto los horarios de ocupación laboral de
los asistentes, por lo que se han establecido dos turnos, a
elegir por el alumno. Uno matinal (de 12,30 horas hasta las
tres de la tarde) y otro de tarde, (de cinco y media a
ocho). Sólo el módulo de ayer martes fue de carácter
intensivo y se prolongó desde las cuatro y media de la tarde
hasta las nueve de la noche. La ubicación para las clases ha
sido la tercera planta de la Biblioteca (junto a la
Dirección Médica), lugar donde se clausurarán hoy las
jornadas del Ingesa.
La atención inmediata ante casos de paradas cardiacas o
cualquier otro caso con complicaciones coronarias requiere
un reconocimiento de la lesión por parte del profesional
sanitario que la atiende y, sobre todo, un reconocimiento de
los medios y recursos de los que se dispone.
De esta manera, la asistencia será más rápida y eficaz y se
podrá evitar la aparición de secuelas posteriores que
dificulten la actividad del paciente.
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