Transcurría el septiembre ceutí con sus playas abarrotadas,
aunque asediadas por las medusas. Y, salvo los dimes y
diretes entre los partidos locales, parecía que el mes se
marcharía sin proporcionarnos grandes sobresaltos.
Una mañana nos echamos abajo de la cama y nos desayunamos
con un drama fronterizo, que a todos nos sobrecogió: cinco
inmigrantes habían muerto al tratar de saltar la valla
fronteriza entre Marruecos y Ceuta. Y se armó un lío.
Inmediatamente, los enemigos de Ceuta se lanzaron a la
yugular de nuestra ciudad y comenzaron a inventarse
situaciones que nada tenían que ver con la realidad de
cuanto acontece en una tierra donde se traga quina en
cantidad. Entonces, en aquel septiembre que estaba tocando
tocando a su fin, surgió la figura de Vivas para manifestar
en toda la península, desde las más importantes tribunas, lo
que muchos no querían oír. Y saltó a la fama diciendo la
verdad.
Pregunta. ¿Se ha dado cuenta de que no ha dejado de ser
actualidad desde que los inmigrantes asaltaron la valla de
la frontera?
Respuesta. No creo que haya sido motivo de actualidad en
primera persona. Es cierto que Ceuta ha estado de
actualidad. Y creo, sinceramente, que ésta se ha aprovechado
bien para concienciar a la opinión pública nacional de que
las fronteras en Ceuta y Melilla no son exclusivamente de
Ceuta y Melilla; que son fronteras de España y de Europa, y
que el fenómeno de la inmigración se manifiesta en Ceuta en
un escenario peculiar porque junto a la condición fronteriza
se une el hecho de la extrapeninsularidad. En consecuencia:
tiene que haber un tratamiento de máxima involucración por
parte del Gobierno de la nación y de la Unión Europea.
También ha sido útil esta actualidad para transmitir la
realidad del carácter del pueblo de Ceuta, que no es otro
que el de un pueblo esencialmente solidario.
P. ¿Cuándo se enteró de que se había producido un asalto a
la valla fronteriza?
R. Aquella misma madrugada, por medio de una llamada
telefónica que me hizo el consejero de Gobernación.
P. ¿Le informaron al mismo tiempo que al delegado del
Gobierno?
R. No lo sé.
P. ¿Pensó en aquellos momentos que los enemigos de Ceuta
tenían ya carnaza para arremeter contra nuestra tierra?
R. Lo que ocurra en la frontera, o cualquier otra situación
donde Ceuta aparezca en el primer plano de la actualidad, es
aprovechado siempre por alguien para atacar a Ceuta. En
cualquier caso, en esta ocasión creo que el tiro les ha
salido por la culata. Es más: nos ha permitido poner de
manifiesto que, además de ser pueblo solidario y frontera de
España y Europa, los argumentos a favor de la españolidad de
Ceuta son de muchísimo calado y muy potentes y poderosos. En
definitiva: que el carácter español de Ceuta y Melilla forma
parte de la esencia de ambas ciudades.
P. ¿Estuvieron las asistencias sanitarias a la altura de las
circunstancias?
R. Yo creo que sí. Entiendo que hubo un comportamiento
extraordinariamente profesional y de muy alta cualificación
del personal de Sanidad, al igual que de la Guardia Civil,
Policía Nacional, Policía Local, Bomberos y personal de la
oficina de extranjería. Y debo subrayar la profesionalidad
de todos los funcionarios públicos que intervinieron en
momentos tan claves.
P. ¿Suspiró usted aliviado al conocer que la Guardia Civil
no había causado la muerte a ningún inmigrante durante el
asalto?
R. Desde el primer momento, le di total crédito a la
información facilitada por la Guardia Civil.
P. ¿Mantuvo contactos continuos con Jerónimo Nieto en
momentos tan importantes para la ciudad?
R. La Ciudad y la Delegación del Gobierno estuvieron en
permanente contacto durante ese día y los posteriores.
P. ¿Es cierto que acudió al programa de TVE 59 segundos
temeroso de que le hubiesen preparado una encerrona?
R. No. Fui consciente de que era una situación difícil;
sobre todo, teniendo en cuenta que yo no me había visto
nunca en una posición parecida. Pero en ningún casó pensé
que fuera una encerrona.
P. ¿No le tranquilizaba saber que en el programa iba a
participar Pedro J. Ramírez?
R. En lo tocante a Pedro J. Ramírez, periodista de fama
significada y bien ganada, tuve la suerte de que el
periódico El Mundo, unos días antes, había dedicado un foro
especial a Ceuta y a Melilla y ello me permitió dar la
versión de los hechos. Y, al mismo tiempo, pude poner de
manifiesto otras características de nuestra ciudad que
sirvieron para que los ciudadanos tuvieran un mejor
conocimiento de ella.
P. ¿Qué tal se portaron con usted durante la entrevista que
le hicieron destacados periodistas de El Mundo?
R. Muy bien.
P. Cuando todavía coleaba el asalto de los inmigrantes a la
valla fronteriza, Ceuta se quedaba fuera de la cumbre
hispano-marroquí y usted saltaba como impulsado por un
resorte para denunciar semejante discriminación. ¿Estaba
convencido de que asalto y cumbre no eran causas del azar?
R. Las situaciones de crisis que se vivieron en las dos
fronteras todavía justificaban más que hubiéramos estado
presentes en aquella cumbre. Teniendo en cuenta que se iba a
hablar y a tomar medidas en torno al fenómeno de la
inmigración irregular, la visión, desde estos dos
territorios que son fronteras, nos parecía que habría sido
muy necesaria. Actualmente, sigo pensando que se produjo una
discriminación no justificada respecto a Ceuta y Melilla,
porque cumplíamos con todas las condiciones y requisitos
para haber estado allí.
P. ¿Cree que el Gobierno actual está dando muestras de
debilidad ante las pruebas a las que lo está sometiendo el
reino de Marruecos?
R. Considero que los gobiernos de España deben mantener unas
buenas relaciones con el reino de Marruecos. Creo que eso es
bueno, porque son nuestros vecinos del sur y porque nos
parece extraordinariamente positivo para España, para el
conjunto de Europa y para Ceuta. Aunque esas relaciones
nunca deben ser incompatibles con la defensa firme de los
legítimos intereses de España. Y han de convertirse en una
intensa y recíproca cooperación entre ambos países.
P. ¿Pudo el presidente de la Junta de Andalucía, Manuel
Chaves, haber usado su influencia para que ZP hubiera
decidido dar el visto bueno a la presencia de Ceuta en la
cumbre hispano-marroquí?
R. No quisiera entrar en nuevas polémicas en torno a la
actuación del presidente de la Junta de Andalucía, porque
recientemente estuve visitándolo y despachando con él. La
cumbre pasó y ahora lo que tenemos encima de la mesa ambos
gobiernos es la firme voluntad de desarrollar el acuerdo
marco de colaboración que ambas instituciones han suscrito y
donde se pueden concretar parcelas muy importantes para
mejorar la calidad de los servicios que prestamos a los
ciudadanos.
P. Luego piensa que su última entrevista con el presidente
de la Junta de Andalucía servirá para que las relaciones
entre ambas comunidades sean mejores que nunca.
R. Es una obligación que tenemos ambos gobiernos. Estoy muy
esperanzado que en los próximos meses ese impulso de la
última entrevista se concrete en actuaciones encaminadas a
mejorar importantes áreas de gestión.
P. ¿Hubo algún momento en que usted se percatara de que
Manolo Chaves no se ha olvidado de que es ceutí?
R. Creo que él nunca se ha olvidado de que es ceutí.
P. ¿En qué medida Javier Arenas pudo reparar el agravio de
esa exclusión al reunirse con usted e Imbroda en Sevilla?
R. La sensibilidad de Arenas en relación con Ceuta no se
demuestra a través de este apoyo en un momento crítico, lo
cual es muy de agradecer. Esa sensibilidad ha estado siempre
presente. Soy testigo privilegiado de la misma. Javier
Arenas ha sido secretario general del PP, máximo responsable
de un partido político con tanta implantación como el
nuestro, pero también como ministro y como vicepresidente
del gobierno siempre ha tenido a Ceuta entre sus
prioridades.
P. Ceuta le debe mucho a Arenas, ¿no?
R. Muchas de las ventajas, de diversas índoles, que hoy
tenemos, muchas de las acciones beneficiosas para Ceuta
–incentivos fiscales, inversiones- se deben a la decidida
voluntad política de Javier Arenas.
P. ¿De verdad cree que Javier Arenas está siempre dispuesto
a echar una mano en lo que represente beneficio para Ceuta?
R. Sin duda alguna, y a las pruebas me remito.
P. ¿Cuánto tiempo ha invertido en demostrarle a Arenas que
usted era lo que es y no lo que le habían contado a él?
R. Creo que Javier Arenas ha tenido ocasión de sacar sus
propias conclusiones respecto a mis maneras de comportarme
en política. Yo sé que cuando se planteó la moción de
censura y yo era el candidato, Javier Arenas era secretario
general de nuestro partido y estoy convencido de que apoyaba
a cualquier candidato que fuera de la lista del Partido
Popular. A partir de ahí, es decir, en el momento en que yo
fui candidato y luego elegido presidente y después fueron
las elecciones, hemos tenido una relación personal de muchos
contactos. Y, desde luego, muy intensa . Por lo tanto, creo
que ha habido tiempo para que Javier Arenas tenga
conocimiento por su propia información. Lo que sí tengo
claro es que se trata de una de las personas más importantes
que he conocido: en el sentido de mayor categoría personal,
profesional y humana.
P. ¿Qué impresión le causó María Teresa Fernández de la
Vega?
R. La conocí en un momento complicado, sin duda alguna. Y me
manifestó, ese mismo día, que tenía intención de venir a
Ceuta y Melilla. Le agradecí el gesto y tuve la impresión de
que es una persona con mucho peso específico dentro del
Gobierno. Espero que ese peso lo utilice en beneficio de las
muchas necesidades que tiene Ceuta y que yo me encargué de
que las conociera.
P. ¿Le cae mejor Cristina Narbona?
R. No se trata de clasificarlas en cuanto a simpatías
personales. No tengo grado de conocimiento sobre ninguna de
las dos para decir cuál me cae mejor que la otra. Aun así,
puedo decir que Cristina Narbona ha tenido respuestas ágiles
para las demandas que la Ciudad le ha hecho. Se está
llevando a cabo la reposición de la red de saneamiento; se
ha impulsado el convenio para la estación depuradora de
aguas residuales; y entre las prioridades de ese
departamento está la de socorrer a Ceuta en el caso de que
haga falta el abastecimiento de agua con transporte
marítimo, y se está trabajando para poder ampliar la planta
desaladora. Trajo a Ceuta un paquete de inversiones que se
están cumpliendo. Tengo que decir, como hice en el Senado
ante el presidente del Gobierno, que el Ministerio de Medio
Ambiente es sensible con las necesidades de Ceuta.
P. ¿Terminará por tenerle tirria a María Antonia Palomo?
R. No creo que llegue a tenerle tirria a nadie. Si la
conclusión de la política es tenerle tirria a la gente,
mejor es que uno se vaya de la política.
P. Hablemos de su paso por la tribuna del Senado. ¿Cómo se
sintió en lo que podía catalogarse de alternativa política
para usted?
R. Tengo que reconocer que hay un cierto miedo escénico. Es
evidente. Yo había trabajado muy concienzudamente la
intervención y, por tanto, soporté mi falta de experiencia
en este tipo de debates con un trabajo previo muy exhaustivo
para demostrar que con la llegada del nuevo gobierno se
había producido un paro en las inversiones y otras medidas
necesarias para que Ceuta pudiera alcanzar unos niveles de
satisfacción de servicios públicos y unas condiciones de
vida equiparables a las medias nacionales.
P. ¿Tuvo algo que ver con la concentración convocada contra
la política de ZP en la Plaza de los Reyes?
R. En absoluto.
P. ¿Cómo son, de verdad, sus relaciones con el delegado del
Gobierno?
R. Son unas relaciones basadas en la cordialidad, en la
educación y, desde el punto de vista institucional, con una
clara conciencia de que nuestra única respuesta a la
delegación del Gobierno tiene que estar basada en la lealtad
institucional.
P. ¿Está convencido de que Mariano Rajoy ganará las próximas
elecciones?
Creo, sinceramente, que Mariano Rajoy es el político más
preparado para ser presidente del Gobierno de la nación. Así
pues, deseo que Mariano Rajoy gane las próximas elecciones.
P. ¿Qué piensa de Juan José Imbroda?
R. Que es un político con mucha experiencia; un
extraordinario trabajador; y una persona absolutamente
comprometida con Melilla y España, y que ha tenido –en lo
que se refiere a nuestras relaciones- el acierto de entender
que necesitamos caminar juntos en muchísimas cuestiones,
porque hay muchos aspectos que justifican que acometamos
iniciativas conjuntamente.
P. ¿Son tan sinceras esas relaciones que ustedes aparentan?
Sí: sí lo son.
P. ¿Dónde radica el misterio para que los ceutíes le tengan
tanta devoción?
R. No creo que sea así. Lo que sí le digo es que me siento
en deuda con los ceutíes por la confianza que han depositado
no sólo en mí, sino en el proyecto político que defiendo y
en el equipo que dirijo.
P. ¿Piensa que arrasaría en las urnas de la misma manera si
lo hiciera con un partido distinto al PP?
R. Eso no me lo he planteado: yo he tenido una novia, he
tenido un equipo de fútbol, he tenido un colegio, y voy a
tener un único partido político.
P. ¿Sueña con ser ministro en algún momento de su vida
política?
R. Puedo decirle con seguridad que no lo voy a ser nunca.
P. Dado que ha sido recibido por el Rey en varias ocasiones
y, además, ha sido invitado a varias recepciones, ¿me puede
decir si Don Juan Carlos se lo ha ganado ya, debido a la
habilidad con que éste se maneja en las distancias cortas?
R. Confirmo lo de la habilidad. Me permito calificarlo como
una persona sencilla, cercana y entrañable. Entiendo que el
Rey es sincero cuando dice que lleva a Ceuta y a los ceutíes
en su corazón. Y con igual sinceridad le he manifestado el
deseo de los ceutíes para que venga a Ceuta. Ese deseo de
los ceutíes se corresponde con un sentimiento de afecto, de
respeto y lealtad hacia la persona de Su Majestad y a la
institución.
P. ¿En qué medida ha cambiado su vida desde que decidió
dedicarse a la política activa?
R. Creo que no ha cambiado tanto. Al menos, yo no tengo esa
sensación. Lo cierto es que sí he conocido a muchas personas
que de otra manera no hubiera tratado. También es verdad que
he madurado en el sentido de ver las cosas desde una
perspectiva más global y de conjunto. La vida me ha cambiado
poco, pero he ganado en tener una visión más amplia, en
relativizar las crisis y, por qué no, en considerar que
conozco más a la persona y a más personas.
P. ¿Ha necesitado mucho de los asesores de imagen?
R. No sé si los habré necesitado... Pero sí es seguro que ni
los he tenido ni los tendré.
P.¿Sigue conociéndose o ha empezado a creerse que usted es
como le ven los demás?
R. Pienso que nadie se conoce absolutamente. La vida te pone
a prueba diariamente.
P. ¿Ha aprendido a dominar la irritabilidad que suelen
producir las críticas negativas?
No absolutamente.
P. ¿Cuándo puede dedicar un tiempo del día a mostrarse sin
afectación, es decir, a la pata la llana?
R. No suelo utilizar una actitud teatral a lo largo del día;
es algo que me resultaría imposible.
P. ¿Conoce ya a muchos de sus enemigos?
R. Algunos se manifiestan como tales. Digamos que conozco a
los que lo exteriorizan
P. ¿Le repatean las adulaciones de quien usa con usted el
mismo servilismo que tuvo con Sampietro y antes con Basilio
Fernández y, así, sucesivamente?
R. Considero que hay pocas personas que se comporten conmigo
de manera servil. Muy distinto es que existen personas que
trabajan para la institución. Y tales personas están
obligadas moral y éticamente a poner el mismo celo y el
mismo empeño en su trabajo, con independencia de quién sea
el que represente a la institución.
P. ¿Cuándo fue la última vez que una buena acción le hizo
dormir como un bendito?
R. Suelo dormir bien todos los días.
P. ¿Hará cambios en el gobierno antes de que se celebren las
elecciones?
R. Nunca se sabe.
P. ¿No le parece que la Asociación Deportiva Ceuta camina
por la Liga sin orden ni concierto?
R. Tengo la ilusión de que se reconduzca el caminar de la A.
D. Ceuta. Quienes hemos vivido de cerca el mundo del fútbol,
sabemos que en los momentos difíciles se necesita el apoyo
de todos.
P. ¿Qué le parece la directiva actual?
R. Creo que la directiva actual tiene el mérito de haberse
echado para adelante en un momento difícil y delicado. El
presidente anterior había manifestado su deseo de dejarlo y
ha habido unos valientes que han dado el paso adelante.
Ahora, repito, merecen el apoyo de todos los aficionados.
P. ¿Es la Policía Local el motivo de preocupación más grande
que tiene usted como gobernante?
R. No; es un servicio básico. Es una policía que –como su
nombre indica- está al servicio de los ciudadanos, y quiero
aprovechar la ocasión para pedir, una vez más, la
colaboración con la Policía Local: que es de todos los
ceutíes.
P. ¿Cree que los acontecimientos que han ido sucediéndose en
los últimos meses le han beneficiado a Ceuta y a usted le
han concedido protagonismo?
R. A los ceutíes no les gusta ser primera página con los
sucesos de la frontera. Como esas situaciones no se eligen,
hay que aprovechar la oportunidad que nos brinda la
actualidad para transmitir la realidad de Ceuta. Y defender
nuestro carácter, nuestras señas de identidad y nuestras
esencias. Y, además, tratar de generar una relación de
simpatía con los peninsulares
P. ¿Piensa que ese fin se está consiguiendo?
R. La comprensión de la gente va aumentando. Lo cual es algo
de lo que debemos congratularnos.
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