La Navidad, aunque algunos no lo
crean, es fecha de recordar cosas pasadas a pesar de que
“cosas pasadas no muevan molinos”.
Bueno, en realidad, la frase es “aguas pasadas no mueven
molinos” pero, servidor, en un alarde de facultades físicas,
no digo mentales para no parecer uno de esos “genios de la
política” que tanto abundan, ha colocado lo de “cosas
pasadas”
Además, nadie debe asombrarse porque, en este fermoso país,
aún llamado España, cada quisqui coloca las cosas como mejor
le parece
Sin ir más lejos, ahí tienen ustedes el Estatut o el decir
de Maragall, ese que nunca ganó unas elecciones y está
gobernando, que Cataluña es una “nación”.
Esto, como decía la sabia de mi abuela, va a terminar como
la comedia de Ubrique. Que, por cierto, tengo que decir y
digo que jamás supe como terminó esa comedia. pero muy bien
no debió terminar. La solución del asunto tiene mala comida,
a pesar de lo que diga, día sí y día también, nuestro
presidente del Gobierno español. Y al hablar del Gobierno
español incluimos, por supuesto a Cataluña que es una parte
de España, como Comunidad Autónoma, y no como esa “nación”
que dicen Maragall y algunos catetos con boinas caladas
hasta los ojos.
Rodríguez, tiene un gran problema y no como la celebre
película que decía: “Huston tenemos un problema”. No puedo
decir tenemos porque, servidor, no tiene ninguno a no ser
tratar de llegar a final de mes y pagar las deudas.
El problema real lo tiene el presidente, Rodríguez, al que
las lenguas, esas que todo lo saben no se cansan de decir
que el hombres más poderos de España, señor Polanco, no le
tienen gran estima.
Si eso es cierto y, al parecer, según esas lenguas, tiene
todas las papeletas de ser verdad, la cosa la tiene
complicada el presidente Rodríguez.
Mal asunto es no caerle bien al señor Polanco. Si le caes
mal tiene todas las papeletas de la tómbola para que te
toque el que te den “puerta”.
Y es que, Rodríguez, nadie está contento con eso que tanto
ilusiona a los catalanes de ser “nación” y que se apruebe
ese Estatut, al que nuestro presidente apoyó desde el primer
momento,
Y ese Esatut, tan apoyado por el presidente , es una patata
caliente que le quema en las manos, pero que no la puede
soltar por muchos esfuerzos que haga y muchas fórmulas
mágicas que tenga, que dicen tiene ocho para solucionar el
problema en el que él solito se ha metido sin llamarlo
nadie.
Y vuelven a cometer el error, enorme error, de querer
“satanizar” al Partido Popular, alegando que todo cuanto
pasa de malo, en España, es culpa de los populares.
Esto de ·”satanizar” y culpar de todo a los populares, no
vale más que para que aumente el número de votantes en las
próximas elecciones.
Es fácil de comprender, las consecuencias de este enorme
error.
El pueblo español siempre estará a favor de quienes
consideran más débiles y a los que hay, por supuesto, que
apoyar contra aquellos que por razones que el pueblo no
entiende quieren culpar de todos los males cuando son,
totalmente inocentes de cuanto se dice de ellos que, en
definitiva, y en opinión de ese pueblo, son los únicos que
defienden la unidad de España y que sólo existe una “nación,
la Nación española.
La consigna “hay que acabar con el Partido Popular” es,
simple y llanamente, una metedura de patita hasta el
corbejón y a la larga, lo hemos escrito antes, sólo
conseguirán aumentar el número de votantes y simpatizantes
de los populares.
A las pruebas nos remitimos, de todo cuanto estamos
diciendo. Las últimas encuestas, aclarando que no creo en
las encuestas, los populares están por encima , en intención
de voto que el PSOE y Rodríguez no llega al aprobado.
Y todo pasa porque, algunos cerebros privilegiados de los
asesores políticose incluso políticos, siguen creyendo que
el pueblo español vive, aún, en el siglo XVI, teniendo el
convencimiento pleno de que los niños vienen de París y los
trae una cigüeña en el pico o que se sigue tragando todo
cuanto le echen. ¡Que error, que gran error!.
Cómo será la cosa, por el asunto del Estatut que, Felipe
González, ex-presidente - presidente del Gobierno español ha
dicho: “Aquí lo que habría que hacer es algo parecido a lo
que se está pactando en Alemania. Los dos grandes partidos
tendrían que formar una gran coalición para salir de esta
situación”. Y añadió: “Nunca hasta ahora PSOE y PP habían
tenido unos equipos tan flojos”.
Que Felipe diga eso del PP parece hasta lógico, pero que
también lo diga del PSOE es una carga de profundidad para
Rodríguez.
O sea que, Felipe, piensa lo que pensamos la mayoría de los
españoles y no cree en fórmulas mágicas porque, entiende que
aquí no hay una Harry Potter con capacidad para realizar
esas magias.
La verdad, si uno fuese, Rodríguez, estaría preocupado,
sabiendo que el señor Polanco, según dicen, no le tiene en
gran estima y lo que ha dicho, Felipe, gran amigo de
Polanco. |