Cerca de trescientas personas entre padres, profesores y
antiguos alumnos del Colegio de la Inmaculada, participaron
ayer, junto a los ochocientos alumnos del centro, en la
tradicional ofrenda floral que se realiza anualmente en la
víspera de la festividad de la Inmaculada Concepción.
Según ha explicado la directora de este centro de enseñanza
(en el que se imparten clases desde infantil hasta
secundaria), María del Carmen Roca, se trata de una
tradición que data de 1850, fecha en que se abrió el
colegio. “Para nosotros es una forma de mostrar el amor a la
Virgen, una fiesta que hemos celebrado siempre y que no
queremos que se pierda”, asegura la máxima responsable de
‘La Inmaculada’.
Por este motivo, el último día lectivo antes del 8 de
diciembre, onomástica de esta Virgen, tanto los alumnos como
muchos otros fieles seguidores, se acercan al patio de este
centro escolar para depositar flores (casi todas claveles
blancos) ante la imagen de la Inmaculada.
|