El Gimnasio Goyu-Ryu se impuso ayer sin demasiados apuros a
la Peña Real Madrid de Melilla en el Martínez Pirri,
logrando así su quinta victoria de la temporada y poniendo
punto y aparte a los resultados negativos cosechados en sus
dos compromisos anteriores.
El conjunto de Tayo disfrutó de la posesión del esférico
durante gran parte del encuentro, mostrando su superioridad
frente al rival melillense, que puso mayor interés en la
labor defensiva en detrimento de su ataque.
Tras un comienzo algo desordenado por parte de ambos
conjuntos, la primera ocasión del partido sería para los
gimnastas, quienes por medio del extremo izquierdo Lino
colgaban un balón en el centro del área visitante que
finalmente despejaría, no sin dificultad, el cancerbero
Manolo.
A los diecisiete minutos de la primera mitad llegaría el
primer tanto del Goyu-Ryu en la tarde de ayer. Adri remataba
de cabeza al fondo de las mallas un centro de Lino, quien
desbordando por su carril protagonizó el mayor peligro para
la Peña Real Madrid durante este primer periodo.
El gol gimnasta supuso lo más destacado de los primeros
cuarenta y cinco minutos, ya que a continuación el partido
se convirtió en una sucesión de merecidas cartulinas para
ambos equipos. El colegiado mostró seis amarillas
prácticamente consecutivas, repartidas por igual entre Goyu-Ryu
y Peña Real Madrid. Tanto los de Santi González como los
pupilos de Tayo entraron en una dinámica de juego duro en la
que Ángel Celadero pudo incluso ser más severo.
Antes de llegar al descanso se producía un polémico gol
fantasma melillista que el colegiado resolvería decretando
falta en ataque contra el guardameta local Samuel. La
polémica jugada suscitó la ira del banquillo visitante y
consiguiente intercambio de palabras con el cuerpo técnico
gimnasta que se saldaría con expulsión directa del encargado
de material del Goyu Ryu. El delegado melillense correría la
misma suerte momentos antes de producirse la entrada a
vestuarios, tras increpar al árbitro.
Durante la segunda parte los de Tayo saltaron al terreno de
juego algo más motivados, mejorando la imagen ofrecida en el
primer tiempo, en el que el buen juego brilló por su
ausencia. El Goyu-Ryu afianzó su dominio sobre la pelota,
impidiendo al conjunto visitante crear ocasiones de peligro.
Una falta al borde del área visitante permitiría al capitán
gimnasta lograr el segundo y último tanto para los suyos.
Marzok materializó un inmejorable golpe franco que se coló
por el centro de la meta de Manolo.
Los locales insistían arriba, mientras que la Peña Real
Madrid intentaba, sin éxito, aprovechar las contras para
sorprender a la zaga gimnasta. Tanto Tayo como Santi
González comenzaron a mover sus respectivos banquillos. La
entrada a pista del local Cristóbal por Bilal dio frescura a
los gimnastas, que gozaron de ocasiones claras para aumentar
su ventaja en el marcador. El último cuarto de hora la Peña
Real Madrid se limitó a aguantar los ataques del Gimnasio
Goyu-Ryu, que fue incapaz de traducir en gol las internadas
de Cristóbal por la banda derecha.
Los de Tayo se llevan así los tres puntos del encuentro
aplazado correspondiente a la décimo segunda jornada de
liga.
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