Un equipo de la televisión pública
de Holanda, VARA, se encuentra en Ceuta realizando un
reportaje en principio basado en las circunstancias
fronterizas y también en el pleno migratorio y de
refugiados. Bajo la dirección de Floris Jan, un equipo de
cuatro personas estuvo durante toda la mañana de ayer en los
entresijos de la zona fronteriza española, acompañados por
agentes de la Guardia Civil.
Un cámara, un técnico de sonido,
un presentador y el director, amén de la intérprete Irene
Gutiérrez, estuvieron durante toda la mañana trabajando en
la parte española de la frontera con el objeto de recoger el
día a día de un lugar por el que transitan a diario en torno
a 30.000 personas, la mayoría de ellos porteadores (en su
mayoría mujeres) que cargan mercancías adquiridas en el
polígono del Tarajal para su posterior venta en Marruecos.
También por la tarde el
prestigioso equipo de profesionales desplazados por la
cadena pública holandesa estuvieron tomando imágenes del
Círculo de Silencio, que apoya a inmigrantes y refugiados,
en la concentración que tuvo lugar en la plaza de la
Constitución.
La grabación les vino que ni
pintado, puesto que ayer se registraron algunos problemas de
tránsito en la zona fronteriza. En efecto, según confirmaron
fuentes de la seguridad del Estado a EL PUEBLO, Marruecos
cortó el tránsito hacia España unilateralmente durante
varias horas.
Ya desde hace varios días se han
producido problemas de tránsito en la frontera, ya que las
autoridades competentes tratan de limitar el volumen y peso
de los bultos que, a duras penas, cargan sobre todo las
porteadoras.
Amplio despliegue policial en la
zona, sobre todo del Cuerpo Nacional de Policía, pero
también con presencia de la Unidad de Intervención Rápida de
la Policía Local.
En el interior de la frontera, las
medidas de seguridad eran más que elocuentes, teniendo en
cuenta que España se encuentra a nivel cuatro de alerta
antiterrorista. Agentes de la Guardia Civil, pertrechados
con armas largas y con chalecos antibala, se encontraban en
la zona de control de vehículos provenientes de Marruecos.
Hacia la zona española, una vez
que se había permitido el tránsito de vehículos por parte de
Marruecos, los controles por parte de las fuerzas y cuerpos
de seguridad del Estado eran exhaustivos. Así lo grabaron
los periodistas provenientes de Holanda que estaban
trabajando sobre el terreno.
En sentido contrario, la Policía
Nacional se esforzaba en alejar a porteadores de la zona de
acceso a la frontera, teniendo en cuenta que, aunque estaba
fluyendo el tráfico rodado, lo cierto es que no se permitía
el paso de personas con mercancías.
De esta manera, los agentes del
Cuerpo Nacional de Policía desplegados en la zona explicaban
a los porteadores -en su mayoría mujeres, como se ha
indicado- que no podían entrar en dirección a Marruecos y
que debían alejarse de la zona inmediata de paso en la
frontera que separa Ceuta y Marruecos.
La situación era bastante tensa y
había personas que querían resistirse a abandonar los
primeros lugares en la cola, los privilegiados, pero que no
tenían más remedio que obedecer las instrucciones que les
daban los agentes policiales.
“Llevo aquí más de una hora y
media”, explicaba una mujer que sólo transportaba un par de
bolsas con ropa y que apenas podían pesar un par de kilos.
Cargada de paciencia, seguía en su sitio.
Por otra parte, la zona
aledaña a la parada de autobuses aparecía abarrotada de
personas, en su mayoría marroquíes. En todo caso, un día más
en la frontera del Tarajal.
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