Búscome se hace eco del manifiesto publicado por las
organizaciones feministas para “proponer a la ciudadanía y a
las candidaturas que se presentan, que las elecciones
legislativas del 20 de diciembre de 2015 supongan una
apuesta real por la igualdad. Entre las propuestas que
reclaman están “en emplear más empleos de calidad y el fin
de los recortes, que aumentan la desigualdad”. Por eso, la
entidad avala “ la derogación de las dos últimas reformas
laborales, el pleno empleo, digno e igualitariamente
repartido entre mujeres y hombres, que el déficit no centre
la nueva política económica, que el tiempo parcial se
compute estadísticamente en tasa diferenciada de la del
tiempo completo, la ratificación del Convenio 189 de la OIT
sobre trabajo decente para las Trabajadoras y Trabajadores
Domésticos, y establecer la protección por desempleo. Además
“ es vital que nuestra economía no vaya de una burbuja
especulativa a otra, que se destine el 3% del PIB a
investigación y desarrollo, con equilibrio de sexos en el
personal científico del CSIC y las universidades, la
reducción general de la jornada laboral y la eliminación de
la brecha de género en salarios, pensiones y cobertura por
desempleo, y que se elimine la declaración conjunta del
IRPF, porque desincentiva de hecho el empleo de las mujeres
casadas”.
Por otro lado, Búscome ratifica “
el reparto social del cuidado de la infancia y las personas
en situación de dependencia”. Para ello, “ hay que exigir la
cobertura universal, gratuita y pública de la escolarización
de 0 a 3 años, la cobertura universal, suficiente y de
calidad de la atención a las personas en situación de
dependencia, una Ley que fije un calendario de ampliación
del permiso de paternidad hasta llegar a las 16 semanas que
dura el de maternidad, de tal forma que cada persona
progenitora tenga su permiso igual, intransferible y pagado
al 100% por la Seguridad Social, aplicar al IRPF la
tributación individual, y cubrir las necesidades de las
familias monomarentales, la infancia y personas mayores con
gasto público, no con desgravaciones fiscales que crean
desigualdades territoriales y sociales. ”
También, “ es vital brindar la
igualdad entre hombres y mujeres en la agenda política de
salida de la crisis, reponiendo el Ministerio de Igualdad
eliminado en 2010, el Instituto de la Mujer diluido en 2014
y los presupuestos para igualdad y violencia de género
recortados un 32,9%, reforzando su incidencia social y
política, su coordinación con las Autonomías y su
cooperación con las organizaciones de la sociedad civil,
cumplir el preceptivo desglose por sexos de las estadísticas
y su publicidad, y dar a los preceptivos informes de impacto
de género de leyes y normas el carácter de análisis crítico
del que ahora carecen, incluyendo el del Presupuesto del
Estado, un Estado laico, listas cremallera y paridad en el
reparto post electoral de cargos de gobierno y de alta
administración”.
Otro punto importante, según
cuenta Búscome, es “reactivar la lucha contra la violencia
de género, esta lucha contra el terrorismo machista tiene
que ser una cuestión de Estado”. Por eso, “ hay que exigir
que se cumpla el Convenio de Estambul del Consejo de Europa
vinculando la erradicación de la violencia a la de la
discriminación y la doble discriminación de inmigrantes,
mujeres con diversidad funcional y dependientes, que se
forme a la judicatura y otros agentes jurídicos para
escuchar sin prejuicios sexistas en el buen trato a las
víctimas y valorar los antecedentes y riesgos de violencia
al establecer guardas, custodias y visitas, modificar el
artículo 416 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal sobre
dispensa de la obligación de declarar contra el cónyuge o
pareja, eliminar del Código Penal la sustitución de las
penas de cárcel por multas en caso de VG, la especialización
obligatoria en materia de violencia, y suprimir el art. 35
de la Ley 4/2015, del Estatuto de la víctima del delito, por
ser una norma contraria a las víctimas”
Además “ hay que erradicar la
trata y la prostitución manifestando nuestra solidaridad con
las mujeres que ejercen la prostitución. Nos oponemos a que
sean perseguidas o penalizadas, reclamamos políticas
públicas para las que deseen abandonar la prostitución y
rechazamos su normalización por el capitalismo neoliberal
que la ha incluido en el PIB”.
De la misma manera, “queremos una
sanidad pública universal, que incluya la salud sexual y
reproductiva y el aborto, derogando el Real Decreto Ley
16/2012 que priva del acceso universal al cuidado de la
salud especialmente a las mujeres, inmigrantes o nacionales
sin cotización, derogar la Ley Orgánica 11/2015, que priva a
las mujeres de 16 y 17 años de autonomía para el aborto,
garantizar la atención al aborto en todos los centros
públicos, asegurar el acceso a la reproducción asistida en
la sanidad pública de mujeres solteras y lesbianas, atender
con perspectiva de género la morbilidad diferencial entre
hombres y mujeres, la eliminación del copago sanitario que
penaliza a las personas ancianas en su mayoría mujeres,
atender al embarazo, parto y puerperio conforme a los
principios de la OMS 2001, y la oposición a la maternidad
subrogada”. “Asimismo queremos Igualdad en la sostenibilidad
de los recursos naturales y sociales”.
Y por último “ hay que
educar en igualdad derogando la LOMCE, suprimiendo los
conciertos con escuelas que segreguen por sexos, el
establecimiento de un área específica de educación para la
ciudadanía que incluya la equidad de género, en todos los
niveles educativos, una orientación académica y profesional
que supere los estereotipos profesionales y la segregación
horizontal y vertical del mercado de trabajo, y la prioridad
a la educación socioemocional y en valores que promueva
activamente relaciones igualitarias y prevenga la violencia
de género”.
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