Así nos definen quienes se niegan a aceptar una sociedad
plural, diversa y multicultural. Así nos definen quienes
rechazan una Ciudad donde sean respetadas y normalizadas
todas las sensibilidades culturales, religiosas e
ideológicas dentro de un marco de libertad, igualdad y
respeto mutuo. Así nos definen quienes rechazan una cultura
compartida, un imaginario común propio de los ceutíes. Así
nos definen quienes se nutren y viven del odio, de levantar
fronteras y barreras entre los hijos del mismo pueblo.
Y es que el artículo de opinión
redactado por Jesús González, publicado el 3 de diciembre en
“El Pueblo de Ceuta” no puede dejar indiferente a nadie. Más
allá de la anecdótica confusión de la autoría del artículo
debido a la similitud de nombres, el contenido marcadamente
divisorio e islamófobo no puede ser pasado por alto.
Lamentablemente los ceutíes aún
tenemos que soportar “el miedo al moro”. Lamentablemente aún
tenemos que soportar la doctrina de “el enemigo viene del
sur”. Lamentablemente aún tenemos que soportar que se
cuestione la hispanidad de los musulmanes de Ceuta, su
“lealtad” y su legítima pertinencia y arraigo en esta
tierra. Y es que el Señor González olvida que los musulmanes
ceutíes son tan ceutíes como el que más y un elemento
fundamental de esta Ciudad tanto como el hebreo, el
cristiano, el hindú, el agnóstico el creyente y el no
creyente.
Los ingenuos Señor Gonzales
rechazamos que se siga refiriéndose a Ceuta y Melilla como
enclaves. Rechazamos que se refiera a Ceuta y Melilla en
términos de conquista y reconquista. Rechazamos que se
separe a los hijos de Ceuta y Melilla entre musulmanes y
cristianos. Rechazamos que se criminalice a toda una
comunidad que representa cerca de la mitad de los ceutíes.
Olvida también el Señor Gonzales
la lucha a los que llama “segmento islámico de la ciudad”
para ser reconocidos como ciudadanos y dejar de ser un mero
número estadístico. “Como si hasta ahora esa comunidad de
religión islámica no hubiera tenido oportunidades u opciones
para encontrar su lugar al sol”. ¿Cómo se atreve el Señor
Gonzales a decir semejante estupidez? Al Señor González
decirle que el fruto de los “vientres de las mujeres del
grupo étnico musulmán” siguen reivindicando el
reconocimiento cultural y académico con la oficialización
del árabe ceutí como patrimonio de todos los ceutíes junto
al hebreo, el hindú y como no, el español, lengua de todos
los ceutíes.
Acaso olvida el señor Gonzales que
gran parte de los peores indicadores sociales se concentran
precisamente en ese sector: discriminación, paro, exclusión
social marginación de sus barriadas etc. Esas “agallas” que
exige el Señor Gonzales al Presidente de la Ciudad deben ser
exigidas para hacer frente a la marginación, a la
inaceptable tasa de pobreza que hay en esta ciudad, a la
elevada exclusión social, a la desigualdad, a la pobreza
infantil, al paro juvenil y a la corrupción.
Y sí Señor Gonzales. Caballas
junto a otras formaciones se han negado a que un genocidio
sea el día de Todos los Ceutíes. Porque Caballas, al igual
que todos los ceutíes, defienden su hispanidad y no la
conquista portuguesa de la Ciudad.
* Responsable de
Comunicación de Coalición Caballas
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