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En ciernes las elecciones sindicales, el responsable de
la candidatura educativa de Comisiones Obreras, Antonio
Palomo, refleja las principales acciones que pretende
emprender el sindicato. Carencias educaivas, críticas,
consecuencias de políticas con las que el sindicato no se ha
mostrado de acuerdo y que no son de este año, sino que se
significan con un “carácter secular”. Las ‘ratios’ son uno
de los caballos de batalla de CCOO, indicando que son
“elevadísimas” y que proyectan en una educación “en precario
y sin los mínimos exigibles de calidad”. Las elecciones
sindicales tendrán lugar el próximo día 19 de noviembre y
suponen un pulso entre los principales actores sindicales.
Pregunta.- Una de las demandas de los sindicatos en el
ámbito educativo es la de contar con más centros y personal
en Ceuta, ¿estas son las prioridades educativas en la
ciudad?
Respuesta.- Son muchas las carencias de la educación en
nuestra ciudad, pero, desde luego, si hubiese que priorizar,
es obvio, que la carencia de centros educativos (situación
que se lleva denunciando hace dos décadas) y la escasez de
personal (déficit rotundamente agudizado en esta legislatura
de recortes) estarían entre las primeras demandas.
P.- Este año se ha criticado el aumento de la ratio en
algunos centros escolares, ¿qué consecuencias puede acarrear
esta situación?
R.- No sólo se ha criticado este año, se lleva haciendo con
carácter secular. Las consecuencias son evidentes. Con una
educación tan peculiar y específica como la que necesita
nuestra ciudad, esas elevadísimas ratios (desconocidas en
otros territorios) condicionan una educación en precario y
sin los mínimos exigióles de calidad y adecuación. Se hace
lo que se puede y no puede ser mucho con aulas de 30 o más
alumnos.
P.- Ceuta destaca por ser la autonomía con mayor fracaso
escolar entre sus jóvenes. ¿Por qué cree que se da esta
situación? ¿Se podría arreglar con más personal docente?
R.- Creo que la anterior respuesta ilustra esta pregunta. La
masificación y hacinamiento de alumnos no es la única causa
del lamentable fracaso escolar de nuestra ciudad, pero, está
claro, que es uno de los motivos fundamentales. Habría que
añadir que las anteriormente aludidas especificidades de
nuestro escenario educativo (interculturalidad, diferentes
lenguas maternas, “peculiar” agrupamiento escolar de nuestro
alumnado....) tendrían que ser abordadas desde un
tratamiento, planificación y enfoque distinto y, desde
luego, con muchos más recursos humanos.
P.- Las elecciones sindicales en el ámbito educativo no
están exentas de polémica, ¿ha detectado algunas de las
irregularidades que se han denunciado como posibles casos de
fraude en el voto por correo?
R.- En este caso se puede aplicar un aserto muy actual,
consistente en afirmar que una mentira o inexactitud
repetida muchas veces se convierte en algo generalmente
aceptado. El quid de la cuestión, que no se ha explicado o
no se ha querido explicar, se produce cuando un votante, por
no puede hacerlo presencialmente o por su propia comodidad,
quiere ejercitar su derecho a votar por correo, a través de
otra persona u organización que lo represente. En las
anteriores elecciones se consideró que era requisito
suficiente para ostentar esa representación una autorización
del interesado (como sucede cuando alguien retira un paquete
o similar en correos). En estas elecciones se ha cualificado
la exigencia con el requerimiento de un poder notarial para
ostentar la representación. Nada que objetar, cuando las
reglas son iguales para todos, es obvio que son
equitativas.En las anteriores elecciones todos los
sindicatos representaron a profesores con la autorización
expresa de los mismos. ¿Alguien puede creer que una persona
con titulación universitaria, entrega una autorización y su
DNI, sin saber para qué, cuando y como van a ser utilizados
esos documentos? Resulta ridículo. En cualquier caso, CCOO
se ha querido mantener y quiere seguir al margen de este
tipo de polémicas que nada aportan al profesorado y que, sin
embargo, si deterioran y denigran la imagen sindical ante
todos.
P.- ¿Hay intereses detrás de estas elecciones sindicales?
R.- Claro está, cuando cualquier persona o colectivo se
somete a la consideración o valoración del trabajo realizado
de, en este caso, sus compañeros, quiere ganar, entre otras
cosas, porque entiendo que todos los sindicatos creeremos
con honestidad que lo podemos hacer mejor que los demás.
Ningún interés, más allá de la sana y honrada rivalidad
propia de las personas que defienden con convicción y fuerza
sus principios y planteamientos.
P.- ¿Qué cambios cree que se necesitan a nivel sindical
para, a su vez, mejorar la situación educativa en la ciudad?
R.- Sería de miopes no ver y reconocer el descenso en la
popularidad y credibilidad de los sindicatos. Fruto de
feroces campañas mediáticas y , cómo no, de errores de bulto
cometidos por las organizaciones sindicales o, más
concretamente, por algunos integrantes de estas, las
organizaciones sindicales no pasamos por el mejor momento en
cuanto a la valoración ciudadana. En consecuencia, estoy
absolutamente de acuerdo en que los sindicatos deberíamos de
cambiar formas, estilos, estrategias, personas.... Lo que si
me gustaría es dejar constancia de la necesidad y utilidad
de las organizaciones sindicales. Son el único contrapoder
del trabajador en una sociedad democrática. Sin sindicatos
los trabajadores estarían solos y abandonados ante el poder
político y administrativo. Me parece extraordinario que se
critique y se exija el cambio en las organizaciones
sindicales, pero no con el objeto de lapidarlas, sino de
modificarlas desde dentro. Cierto que para eso la sociedad
actual adolece de los valores que encierra la palabra
compromiso. Son admisibles las mas acervas críticas, pero
acompañadas de la necesaria implicación y compromiso para
que la dinamización y revitalización de los sindicatos sea
posible.
P.- ¿Hay una verdadera unidad entre los sindicatos para
defender los derechos e intereses de los docentes?
R.- Estimo que sí. La unidad de los sindicatos durante las
dos últimas décadas en nuestra ciudad ha sido ejemplar.
Datos objetivos avalan esta afirmación: el altísimo nivel de
afiliación, la inmejorable participación en los comicios
sindicales, el prestigio que, en otros territorios, tiene
nuestra Junta de Personal Docente.... No es menos cierto
que, fundamentalmente en períodos electorales, se producen
indeseables y llamativas disfunciones sindicales que
posteriormente desaparecen para, invariablemente, retomar la
unidad sindical y afrontar objetivos comunes.
P.- Estos últimos años han estado marcados por la reforma
educativa y las duras críticas que ha recibido por parte de
todos los sindicatos, ¿Ésta ha tenido alguna ventaja para
Ceuta?
R.- La reforma educativa, encabezada por la LOMCE, ha sido
una reforma que poco o nada aporta y que ha sido el cambio
educativo más denostado y criticado de toda la democracia y
en todos los territorios, por tanto no percibo que esta
reforma haya aportado nada positivo a nuestra ciudad.
P.- ¿Por dónde cree que se debería orientar una reforma
educativa?
R.- Sería muy complejo enumerar todos los aspectos y
requisitos necesarios para conseguir un sistema educativo
eficiente y eficaz, pero opino que, entre otros, una
verdadera reforma tendría que concretarse en una Ley
educativa con vocación de permanencia en el tiempo y con un
altísimo nivel de consenso. No es admisible que ninguna de
las últimas leyes hayan alcanzado un mínimo nivel de
desarrollo y está última va por el mismo camino, ya que casi
todos han profetizado su pronta derogación.
P.- ¿Cuáles son los problemas a los que se enfrentan en
su día a día los docentes ceutíes?
R.- Pues los mismos que los docentes de cualquier territorio
de nuestro país (escasez de recursos humanos y materiales,
poco apoyo sociofamiliar o desconocimiento de la importancia
del rol del docente, pérdida de valores....) a los que hay
que sumar nuestros peculiares déficits de: falta de
construcciones escolares, ratios elevadísimas y el
aislamiento y abandono ministerial que propicia nuestra
carencia de competencias.
P.- El nuevo director provincial de Educación procede del
mundo sindical. ¿Se ha notado el cambio en estos meses que
lleva en el cargo? ¿Qué opinión le merece?
R.- El nuevo director provincial es una persona inteligente
y con experiencia en el ámbito educativo de nuestra ciudad.
Entiendo que accede al cargo con unos objetivos y una tarea
muy concreta que, en mi opinión está cumpliendo más que
acertadamente. Cuando León Bendayán es nombrado director
provincial, el clima educativo y en los centros de nuestra
ciudad es irrespirable, tenso y de extrema confrontación. En
mi opinión, se le requiere para dar un giro a esa
insoportable e insostenible situación, extremo que se ha
producido. No es que ya no haya carencias, ni problemas,
sino que la actitud y el talante es otro. Los problemas no
se plantean desde la confrontación, sino desde el diálogo y,
a ser posible, desde el consenso. Es también manifiesto, que
los cambios en los servicios centrales del ministerio han
contribuido positivamente a esa transformación.
P.- ¿Qué resultado espera de estas próximas elecciones?
R.- Deseo que se produzca una altísima participación, como
ha sido tradicional en todas las elecciones educativas,
señal de que los docentes respaldan a sus representantes y
valoran su trabajo.
Obviamente, también desearía el triunfo de CCOO, ya que
honestamente creo que el equipo de trabajo de mi sindicato,
con su dedicación, entrega y eficacia, se ha hecho merecedor
al mismo.
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