Responsables de la central Satse, de Enfermería, han
advertido que la aprobación de un Real Decreto por parte del
Gobierno podría suponer “un colapso” de la Sanidad en Ceuta,
si se tiene en cuenta que se recortan las facultades del
sector.
Elizabeth Muñoz, secretaria autonómica de Satse, y el
presidente del Colegio Oficial de Enfermería, Luis de la
Vega Durán, fueron muy duros en sus valoraciones a la hora
de denunciar que los más de 450 profesionales de la
Enfermería de Ceuta “dejarán de usar e indicar determinados
fármacos sin la prescipción previa de un médico”. Se exponen
incluso a actos que incurrirían en el ámbito judicial penal,
“por intrusismo profesional”. En todo caso, han hablado de
una “hecatombe” y una “triple traición” hacia el sector.
Están muy enfadados y se plantean incluso declarar “persona
non grata” al ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, y también
emprender “una huelga competencial”, obligados, dicen, por
el Gobierno del PP.
Estiman que la labor que realizan los profesionales de la
Enfermería se verá mermada en su funcionamiento habitual por
la introducción de trámites procedimentales que en
definitiva repercutirán en un problema que, a la postre,
repercutirá en los propios pacientes.
Vacunas, curas, atención directa a pacientes que simplemente
necesitan una medicación, se verán postergadas en el tiempo
ya que los enfermeros, un personal altamente cualificado,
deberán tener previamente el visto bueno de los médicos.
Subrayan el hecho de que el Ministerio de Sanidad va a
incumplir la Ley del Medicamento y que “engaña a la
profesión enfermera y aprueba una normativa que perjudica a
los caballas”.
Así las cosas, denuncian que “los más de 450 profesionales
de Enfermería de Ceuta no podrán usar ni indicar a sus
pacientes medicamentos sujetos a prescripción médica sin la
previa receta del médico, lo que conllevará una peor
atención a los caballas: más esperas, más consultas y más
gestiones”. Se refieren en concreto a la aprobación por
parte del Gobierno del PP de un Real Decreto que también
“perjudicará al Instituto de Gestión Sanitaria (Ingesa).
Según Muñoz y De la Vega, “el Ministerio de Sanidad ha
traicionado y engañado a la profesión enfermera ceutí al
modificar, en el último momento, el texto del Real Decreto
de prescripción enfermera que había acordado con la Mesa de
la Profesión Enfermera y aprobar, finalmente, una normativa
que deteriora la calidad asistencial que se ofrece a los
ciudadanos”.
“Patata caliente”
En este contexto de denuncia de las carencias asistenciales
que van a brindar los enfermeros tras la aprobación del Real
Decreto, los representantes del sector de Enfermería han
indicado que “una vez se publique en el Boletín Oficial del
Estado el Real Decreto, el Gobierno del PP pasará la patata
caliente a las comunidades autónomas y será al Ingesa al que
le corresponda asumir una situación careada por la
administración central”.
Además, apuntan al hecho de que “la circunstancia de que el
texto inicial acordado con la profesión enfermera fue
ratificado también por Ceuta en la reunón del Consejo
Interterritorial el Sistema Nacional de Salud, celebrado el
pasado mes de marzo, celebrado el pasado mes de marzo, por
el entonces consejero de Sanidad Abdelhakim Abdeselam Al-Lal”.
Por ello, han solicitado una reunión con la actual consejera
de Sanidad de la Ciudad Autónoma de Ceuta, Adela Nieto.
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