La situación del polígono del Tarajal se ha convertido en un
problema debido al incremento de los porteadores. El
presidente de la Ciudad, Juan Vivas, reconoció ayer que
“aquello es un problema muy complejo”.
Si bien “no manejo una estadística muy precisa, pero según
me dice la persona que tenemos allí delegada ha aumentado
considerablemente el número de porteadores que acude
diariamente. Y cuando aumenta el número de porteadores
aumentan las complicaciones”.
Además se trata de “una instalación con una capacidad
limitada y que estamos viviendo también las consecuencias de
un cambio de aprovechamiento de los polígonos en relación
con la idea originaria que lo justificaron. Se inició hace
ya bastantes años pensando que iban a ser naves para un uso
industrial, comercial y de almacenamiento al por mayor, pero
en ningún caso se pensaba que aquello iba a estar
prácticamente dedicado de manera casi exclusiva al tránsito
transfronterizo”.
Por tanto “no se corresponde con la idea originaria. Todo lo
que significa equipamiento, infraestructuras no se
corresponde con la realidad actual. Son elementos
estructurales y eso tiene difícil arreglo. Si no lo
reconocemos estamos negando la realidad. Se pueden
establecer medidas paliativas y el esfuerzo que hace todo el
mundo es notable”.
Vivas destacó que “hace un esfuerzo notable la Delegación
del Gobierno, a través fundamentalmente de la Policía
Nacional, de la Guardia Civil, también hace un esfuerzo los
titulares de las naves y lo hace la Ciudad en todas las
áreas que son de su competencia. Posiblemente desde el punto
de vista del resultado no alcance el nivel de satisfacción
que sería razonable por esas cuestiones de índole
estructural que parten de la concesión originaria de la
misma”.
Muchas son las personas que pasan diariamente por el
polígono del Tarajal, en lo que Vivas calificó como un tema
complejo. Desde la Ciudad se intentan aportar soluciones y
el presidente apuntó ayer una posibilidad.
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