La plaza Nelson Mandela cuenta
desde hace unos días con un servicio de vigilancia.
Se trata de personas que están
acogidas al Plan de Empleo local y cuyo cometido es el de
realizar labores de prevención. Así, el cometido de los
vigilantes se centra en tratar de evitar actos vandálicos,
como serían la realizacion de pintadas en las zonas más
visibles de la plaza.
Además, también están vigilantes
en torno al creciente número de ciclistas que se dan cita
por las tardes y que en algunas ocasiones han llegado a
poner en riesgo a peatones, tanto en la plaza como en zonas
aledañas, como puede ser el Paseo del Revellín.
Recientemente se actuó con un plan
de choque para borrar las pintadas que se están realizando
por parte de grupos de jóvenes que han “tomado” la plaza.
Sobre todo los fines de semana se
agrupan en torno a unos cuarenta jóvenes y últimamente se
están dedicando a fumar con arguilas, incluso hasta tres se
han llegado a ver.
El principal problema lo
constituyen las biciletas. De hecho, suelen insistir en
realizar “caballitos” con los ciclos y advierten a los
viandantes que si tienen problemas con ellos, que acudan al
seguro. En todo caso, los vigilantes tienen instrucciones de
no enfrentarse a ellos, sino que en caso de que se produzcan
situaciones problemáticas, han de dar aviso a su central y
que ésta, a su vez, se ponga en contacto con la Policía
Local para que efectúe la intervención que fuese oportuna.
La situación en la zona centro se está convirtiendo en un
problema y son numerosos los viandantes que se muestran
quejosos del hecho de que el tránsito de bicicletas puede
convertirse en un grave problema. De momento no se han
producido accidentes, pero la actitud de algunos jóvenes, en
algunos casos muy agresiva, se está convirtiendo en un
problema.
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