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El portavoz del Gobierno de la Ciudad, Jacob Hachuel, fue
preguntado ayer por la postura del Gobierno ante las
críticas surgidas tras conocerse el segundo listado del plan
de empleo, y del que desde la oposición se ha insistido en
la necesidad de atender principalmente a las familias que no
tienen recurso.
Sobre esta cuestión, Hachuel resaltaba que “la única parte
de los planes de empleo que se otorga de forma ‘subjetiva’
es un 35% que depende de los Servicios Sociales”. El
portavoz del Gobierno pidió que se entrecomillara la palabra
‘subjetiva’ porque avanzó que pese a haber utilizado dicho
término, los Servicios Sociales también tienen su censo, sus
baremaciones y sus informes, a través de los cuales se rigen
para otorgar el plan de empleo a ese cupo del 35%. Por otro
lado, el 65% restante, tal y como así aseguró Hachuel, “se
hace de forma absolutamente mecánica, mediante un ordenador,
al que se le mete todos los datos: tiempo de desempleo,
miembros de la unidad familiar, declaración de la renta si
la tuvieran, ingresos, otras ayudas, etc., y es el ordenador
el que a través de estos datos saca un listado del doble de
personas solicitadas para que, tras un segundo repaso, si
alguien no cumpliera con los requisitos ir tirando de esa
bolsa, por lo que me parece que una forma más objetiva y
transparente que esta es difícil”, avanzando que mientras el
PP continúe gobernando continuará utilizando esta fórmula al
considerarla, además de “justa, también transparente”.
Finalmente, y en cuanto a posibles repeticiones de
beneficiarios del plan de empleo en años sucesivos, Hachuel
destacaba que este caso tan sólo se da cuando se habla de
perfiles en los que no se han producido nuevos desempleados
y que por consiguiente se cubre con los mismos que ya había,
y que suele darse en personas con cierto nivel académico y
por tanto de forma muy excepcional.
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