El sector del taxi necesita mejoras, pero no todas
ellas tienen que ver con la renovación de los vehículos y
así lo expone José Reyes, presidente de la Asociación de
Autónomos del Taxi. Después de que el Gobierno haya
anunciado su intención de reunirse con los representantes
del sector y de que se renueve el 15% de la flota, Reyes
recibe la información con algo de escepticismo, aunque
dispuesto a poner sobre la mesa todas las necesidades que
tiene el sector. Entre ellas, destaca la necesidad de subir
el listón en los exámenes que dan acceso a una licencia de
taxista y que las pruebas sean más selectivas.
Aunque todavía no han sido convocados por ningún consejero,
Reyes ha contestado a las manifestaciones del portavoz del
Ejecutivo el pasado viernes en las que informaba de la
intención del Gobierno de mantener una reunión con el
sector. El representante de los Autónomos del Taxi,
asociación que representa a casi la totalidad de los 118
coches con licencia que operan en la ciudad, explica que los
vehículos se están renovando pero que el proceso lleva su
tiempo. Y es que, desde que se solicita un nuevo coche hasta
que el taxista lo tiene pasan entre tres o cuatro meses.
Además, Reyes critica “los fallos” de la administración que
exige que el taxista presente el número de matrícula antiguo
y el del nuevo coche para pedir un cambio por mejora de
material.
Revisión cada seis meses
Asimismo, el presidente de esta asociación dice no entender
de dónde sale el porcentaje del 15% de vehículos que el
Gobierno quiere renovar. Supone, y así lo traslada, que será
el de los coches más antiguos. No obstante, recuerda Reyes,
si estos taxis están circulando es porque la Ciudad Autónoma
así lo permite ya que, cada seis meses, están obligados a
pasar una revisión en el Parque Móvil y en la Inspección
Técnica de Vehículos (ITV). Eso sí, reconoce también que es
necesario cambiar algunos vehículos.
Por otro lado, advierte Reyes, el Gobierno no tiene que
prever la renovación del sector, ya que es algo que, apunta,
“hacen los taxistas”. En los últimos meses el cambio de la
flota ha sido constante, como se puede ver en las calles.
En cuanto a las tarifas y la posible modificación de los
suplementos, Reyes dice desconoce de dónde ha podido partir
tal propuesta. “No se ha hablado nada de subir la tarifa,
llevamos tres años con la misma porque debido a la crisis
entendemos que los ciudadanos no están para que se les suba
el precio del taxi”, reconoce el presidente de la asociación
de taxistas para señalar que, antes de que se plantee una
subida de precio, tendrán que abordarlo en el sector.
Los exámenes para obtener la licencia son otro de los temas
que Reyes quiere poner sobre la mesa. Según explica, él ya
ha propuesto al Gobierno en varias ocasiones que un
representante del sector esté en el tribunal para exigir a
los aspirantes los conocimientos que, entienden, deben tener
los taxistas. “Por qué no se plantean pedir, cómo mínimo, el
graduado escolar”, se pregunta Reyes para decir que, de la
actual manera, en el sector “entra cualquiera”. “Esto lo
único que hace es denigrar el sector del taxi”, advierte. Y
es que, entiende que los taxistas tienen que tener “un
mínimo de cultura y conocer la historia de la ciudad porque
son lo primero que se encuentra el turista, pero algunos ni
hablan bien español”, lamenta el presidente de la
asociación.
“Al taxista hay que reciclarlo, no al taxi”, advierte Reyes
para pedir a los responsables políticos que miren más por el
sector y “menos por los votos”. Mientras, espera que las
declaraciones de Jacob Hachuel no caigan en saco roto y que
desde el Gobierno tomen nota de las reivindicaciones del
sector para tratar de ponerlas en marcha y mejorar el
gremio.
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Los taxis piratas, un lacra sin aparente solución
Los taxistas piratas son una lacra
para el sector del transporte público en la ciudad. Desde
hace años, conductores de Marruecos llegan a la ciudad para
transportar, sobre todo a transfronterizos, hasta el
Tarajal. Una práctica ilegal que afecta tanto a los taxistas
como a la empresa de autobuses y que, a pesar de los
controles, sigue dándose.
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