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La Guardia Civil ha detectado
varios acercamientos aislados de inmigrantes subsaharianos
al vallado que separa la ciudad de Marruecos pero no se
están produciendo intentos de salto en grupo.
Según han informado fuentes del
instituto armado, desde finales del pasado año no se ha
vuelto a producir ningún intento de asalto en grupo de
inmigrantes subsaharianos que esperan en el otro lado de la
frontera, en suelo marroquí.
La Guardia Civil ha detectado el
acercamiento de inmigrantes al vallado pero, en muchos
casos, sin llegar a intentar el salto de la doble valla
fronteriza.
El último inmigrante subsahariano
que trató de saltar la valla fue el pasado martes cuando un
joven de 18 años y natural de Guinea Conakry cayó al vacío
desde lo alto del vallado -situado a seis metros de altura-,
produciéndose heridas de gravedad.
El joven permanece ingresado en el
Hospital Universitario de la ciudad al sufrir fractura de
pelvis y del fémur como consecuencia del fuerte golpe contra
el suelo.
En las inmediaciones de la
frontera, concretamente en las zonas boscosas que existen en
las inmediaciones del perímetro fronterizo, suelen
concentrarse los inmigrantes, fundamentalmente de origen
subsahariano, a la espera de poder cruzar la frontera
valiéndose de diversos métodos.
Lo cierto es que desde hace
varios meses no se han vuelto a producir intentos masivos de
salto de la valla, y los inmigrantes recurren a escondites
en vehículos que cruzan la frontera o bien en llegar a Ceuta
por mar.
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