Se nota que estamos en ruta de
elecciones generales, en las que el Gobierno actual del PP
tendrá que “sudar tinta”para poder continuar, aunque sea con
alguna ayuda como la de Ciudadanos, porque los demás, aunque
sean necesarios, me da la impresión que les van a dar con la
puerta de los votos en la nariz.
Y digo que se nota que avanzamos
hacia esas elecciones porque, a lo largo del verano, y muy
especialmente en las fechas de más salidas, hemos visto como
se iban recortando los precios de los combustibles, hasta el
punto de que ahora mismo el gasoil está muy poco por encima
del euro, lo que implica que ha habido, entre julio y
agosto, una bajada en el precio de 12 a 14 céntimos, cosa
que se nota considerablemente a la hora de llenar el
depósito.
No sé, en estos días, al llevar
bastante tiempo fuera de Ceuta, si la bajada en la propia
Ceuta ha ido por el mismo camino, o sí aquí para sacar más,
los impuestos de los carburantes siguen a la altura de donde
estaban a finales de junio.
Un poco tarde, creo que varios
meses tarde, ha dado el Gobierno marcha para poder recuperar
el personal lo que ha venido perdiendo, desde hace ya mucho
tiempo.
Con todo, si los precios en eso
tan usado como son los carburantes, o en los viajes de
autobús, tren o avión, se colocan a la baja, es posible que
muchos de los que habían vuelto la espalda al PP, puedan dar
otra media vuelta para ponerse de su lado.
Es más, y lo vengo diciendo desde
hace mucho tiempo, tal vez si Rajoy y todo su equipo hacen
una serie de rogativas o de excursiones piadosas a Fátima,
Lourdes, a la Santina o a la Moreneta, para terminar en el
Rocío, con esos viajes o rogativas algún milagro podría
haber, pero para que vuelvan a sacar mayoría absoluta, como
la que tienen, tendrán que darse, al mismo tiempo y en las
urnas, todos los milagros juntos, porque “los favores” que
les han hecho, en todos estos años, sus propios colegas, les
pueden tener apartados de gobernar, dos, tres o cuatro
legislaturas, yendo por el buen camino y ... ni se sabe
cuantas, en el caso de que los aventureros de Podemos
lleguen a tocar poder.
El fin del verano traerá “lo de
Cataluña”, donde no se sabe en qué va a terminar todo, si no
se corta de raíz la mala hierba que está sembrando, desde
hace mucho tiempo, Mas y los que le quieren acompañar. Ahí
ya veremos, porque puede representar “los entremeses” para
que sigan más tarde, el primer plato, el segundo, el postre,
el café, la copa y el puro. Y todo ello con un país que no
sabe muy bien hacia donde podrá encaminarse, si el PSOE,
medio roto, y con un secretario general que no saben donde
anda, se alía con algunos de esos que han nacido para llevar
el desorden allá donde estén.
Hemos empezado con el combustible,
con su bajada o abaratamiento, luego ya veremos si “el de la
coleta” y sus acompañantes de Somosaguas logran que su amigo
de Venezuela, como pago por los favores recibidos, les
concede más petróleo, a precio de saldo.
No quiero entrar en esto, ni dar
pie a que aquí, que no hay muchos a favor del de la coleta y
los suyos, salten a la arena unos cuantos, pensando que con
esas amistades el carburante lo van a lograr gratis.
En época de las elecciones
todo es posible, con rogativas, con promesas incumplidas y
con lo que a cada uno se le ocurra.
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