Tanto Chakir como Yunes están
convencidos de que conseguir el ascenso a Segunda B es
posible. Sin embargo, para ello será imprescindible el apoyo
a los aficionados, cuyo aliento y ánimo serán fundamentales
para hacer frente a los “duros rivales” a los que tendrá que
verse las caras el conjunto caballa.
Los hermanos Kaiouch Tuhami
coinciden en que, sin el público en las gradas, será “mucho
más difícil” pelear por los objetivos marcados, puesto que
“son ellos los que presionan más tanto al rival como a los
árbitros, y nos ayudan mucho en los momentos más difíciles,
cuando hay que tirar hacia adelante”.
Para ambos “la ilusión que le
entra a un jugador cuando salta al campo al inicio del
partido y ve las llenas gradas es muy importante”. “Juegas
con una motivación distinta, porque sientes que ellos
también están jugando contigo, y que están sintiendo el
escudo al igual que lo sentimos nosotros”, reconocen los
ceutíes.
Por todo ello, Chakir y Yunes
aseguran que “sería un orgullo que los aficionados se
vuelquen con el equipo, que estén encima de nosotros, y que
sientan los colores de la misma forma que lo sienten cada
jugador de esta plantilla, porque la afición también juega
los partidos”.
Y una forma inmejorable para
ello, es “que se abonen y que desde el primer partido están
a nuestro lago, porque nuestra intención es darles este año
muchas alegrías”.
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