Un joven acabó ayer herido de gravedad tras lanzarse al agua
desde el Foso San Felipe e impactar contra las rocas. El
bañista tuvo que ser trasladado al Hospital Universitario
después de que Cruz Roja lo inmovilizara y le curara las
heridas en un primer momento.
Según informó la Institución Humanitaria en un comunicado,
el incidente se produjo en torno a las 18.30 horas, cuando
los socorristas que se encuentran en la playa del Chorrillo
se dieron cuenta de que había un bañista en las escaleras
situadas en el puente de la Avenida Martínez Catena con
heridas de consideración.
Según los testigos, el paciente se habría lanzado al agua
desde la zona del foso produciéndose un impacto que le
provocó heridas de consideración. Pero, al estar fuera del
alcance visual de los socorristas de Cruz Roja, ni se le
pudo avisar de que esa maniobra era peligrosa ni se pudo ver
el accidente.
Tras el aviso, y al mismo tiempo que se movilizaba la
segunda ambulancia de Cruz Roja, ya que al mismo tiempo se
estaba atendiendo a una mujer con un golpe de calor, los
socorristas y DUE del Puesto de Primeros Auxilios
procedieron a la inmovilización del joven en un tablero
dorsal, colocándole también un collarín cervical, además de
curarle las heridas de consideración que había provocado la
caída. Tras su estabilización, el paciente fue evacuado en
la ambulancia al Servicio de Urgencias del Hospital
Universitario.
Desde Cruz Roja, una vez más, insisten en que deben evitarse
todo tipo de conductas que puedan llegar a desencadenar
accidentes de graves consecuencias. Por ello, advierten del
peligro que representa lanzarse de cabeza desde las
escolleras, rocas, zona de desconocida profundidad o en el
mismo foso.
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Una mujer, trasladada al Hospital a causa de un fuerte golpe
de calor
Cruz Roja trasladó ayer a una
mujer, mayor de edad, aquejada de un golpe de calor con un
estado de severa deshidratación.
Alrededor de las 17:30 horas, una usuaria de la propia playa
de la Ribera dio la voz de la alarma en el Puesto de
Primeros Auxilios.
Según manifestó esta mujer, la paciente llevaba varias horas
al sol y al constatar que no se movía decidió avisar a los
servicios de emergencia de Cruz Roja. Los socorristas
procedieron entonces a su traslado al puesto de socorro
donde empezó a atenderla el médico.
Tras hidratarla e hidratarla, se logró que la paciente
estuviese en estado de ser evacuada por la propia ambulancia
medicalizada de Cruz Roja al Servicio Urgencias del Hospital
Universitario.
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