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112 chicos de entre 16 y 17 años
participan en la expedición ‘Rumbo al sur’, que ayer pasó
por Ceuta. Los adolescentes han visitado Melilla y Marruecos
y ayer le tocó el turno a la ciudad ceutí, donde llevaron a
cabo un completo programa.
La expedición visitó el complejo
de las Murallas Reales y por la noche asistió a la ofrenda
floral a Nuestra Señora de África. A las 23 horas fueron
recibidos por el consejero de Turismo, Fernando Ramos, en la
Feria. Tras darles la bienvenida dieron una vuelta por el
recinto ferial y después regresaron al cuartel de la Legión,
donde pernoctaron.
Telmo Aldaz de la Quadra Salcedo,
director de la expedición, atendió telefónicamente a EL
PUEBLO. Según explicó llevan diez años de expediciones “y en
este décimo aniversario hemos querido pasar por Ceuta y
Melilla”. No es la primera vez ya que en anteriores
ocasiones la expedición ha pasado por Ceuta.
Aldaz la definió como “un trozo de
España único, mezcla de África, América y Europa”. Además
dijo que la ciudad “tiene algo” que la hace especial, como
puede ser su situación geográfica o el carisma de su gente.
Además es la “puerta de África, un
continente mágico y maravilloso”. En las ediciones
realizadas han pasado más de un millar de jóvenes, que han
tenido la oportunidad de ver mundo y ampliar sus horizontes
vitales.
El proyecto está “muy ligado a
Ceuta”. En estos diez años “vamos viendo los cambios, porque
todo va evolucionando”. Ceuta es una ciudad “amable,
agradable, con buena gente y entre dos mares”.
El director de la expedición
aseguró que el objetivo es “empezar a cambiar las cosas. Con
la juventud que tienen pueden dar el primer paso. Tienen que
mirar a la gente a la cara, formarse una idea sólida sobre
el mundo que les rodea”.
Como ejemplo dijo que no quiere
que los chicos se centren en lo que puedan encontrar en una
página en Internet, si no que “tengan una experiencia
práctica y no opinen a la ligera. El viaje tiene un objetivo
muy ambicioso”.
Mucha ilusión
Aldaz reconoció que cuentan con un
“presupuesto limitado”, pero lo suplen con “mucha ilusión”.
En esta iniciativa colabora el Ejército, así como bomberos,
médicos, profesores, periodistas y cineastas.
El requisito para participar en
esta interesante expedición consiste en ser de cualquier
nacionalidad, pero tener habla castellana. “Todo joven de
cualquier nacionalidad que hable español puede participar.
Es la segunda lengua más hablada en el mundo”, expuso Aldaz.
Además junto a la lengua se transmiten una serie de valores,
como “el encuentro, el respeto, valores humanos en
definitiva”.
La mayoría de los chicos que
participan en esta iniciativa son españoles, aunque también
hay de otras nacionalidades, por ejemplo de Estados Unidos,
Canadá o China.
Junto a ellos viajan 39 monitores,
formando un grupo que alcanza la cifra de 150 personas.
Esta mañana tienen previsto
coger el ferry de las 10 de la mañana y después se dirigirán
al Coto de Doñana.
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