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El nuevo Partido Popular se apunta a los cambios internos y
a la reforma de la ley electoral, aunque en sentido distinto
al que piden los partidos emergentes. En el ámbito interno,
el Partido Popular no hablan de primarias, pero si congresos
asamblearios, y la participación directa de los militantes
en la elección de los presidentes nacional, regionales y
provinciales, eso sí, dejando a salvo lo que dicen los
estatutos, que el candidato a la presidencia del Gobierno es
el presidente del partido. Entre las conclusiones, que irán
después al programa electoral, está también la limitación de
mandatos, a dos legislaturas; las incompatibilidades: una
persona, un cargo, y de “idear la fórmula de compromiso
escrito y registrado, junto a la declaración de bienes de
todos nuestros candidatos, de abandonar el cargo o puesto,
en caso de apertura de juicio oral, por un delito de
corrupción política o de gravedad electoral”.
En la clausura de la conferencia
política del Partido Popular del pasado fin de semana, el
presidente ha avalado los cambios propuestos por la
dirección del partido, como aumentar la democracia interna y
reformar la ley electoral para primar al partido más votado
con más escaños. “Cambiaremos lo que haya que cambiar para
conectar mejor con la sociedad”. Palabras de importante
relevancia dichas por el Presidente del Gobierno y
Presidente del Partido Popular.
Ha quedado claro que en el Partido
Popular no se instaurarán las primarias que realiza el
resto. El Partido Popular proponen hacer unos congresos
asamblearios, en los que cada militante tenga un voto, pero
descartando las primarias.
Esta medida es para promover la
democracia interna y mayor participación que el partido. En
el Partido Popular no se le quiere llamar primarias, pero
pretenden impulsar su propio modelo de primarias con el voto
directo y asambleario de todos los militantes, también para
elegir a sus distintos candidatos. La pugna por introducir
ese debate ahora no ha sido ni con la actual dirección ni
con la línea más dura ideológicamente del partido. Ha sido
más un bloqueo generacional, de las decenas de cargos
internos, alcaldes, presidentes de Diputación, diputados y
senadores que llevan décadas en su cargo y se resisten a
abrir paso a los más jóvenes.
La reforma de la ley electoral
busca la estabilidad gubernamental a base de primar al
partido más votado, pero además, el Partido Popular plantea
otra reforma, con el fin de que los restos no beneficien a
los partidos más pequeños, en especial a los nacionalistas.
Consiste en cambiar la distribución de los restos
electorales provinciales, creando una bolsa de entre 15 y 20
escaños que se distribuirían entre los partidos que
acumularan más restos. Lo que serviría, para contrarrestar
la queja de algunas fuerzas políticas del desequilibrio
entre la representación que logran los partidos nacionales y
los que se presentan únicamente en un territorio, en alusión
a los partidos nacionalistas. Pero además, el Partido
Popular retomará en su programa la propuesta para las
elecciones municipales que garantice que gobierne el partido
más votado. Sería alcalde quien obtenga la mayoría absoluta.
Si no, quien logre el 35 por ciento de los votos, con una
diferencia de 5 puntos sobre el segundo. Si nadie
consiguiera ese porcentaje de voto, se iría a una segunda
vuelta, a la que pasarían los partidos que obtuvieran un 15%
de los votos. Sería elegido alcalde, en esa segunda vuelta,
el que obtuviera el 40% o el que gane por 7 puntos al
segundo. Si nadie lo logra, se repartirán como hasta ahora y
habrá que llegar a acuerdos para elegir alcalde.
Los nuevos tiempos
políticos, enseñan que la cercanía a los ciudadanos es muy
necesaria, el cambio de aptitud del Partido Popular era una
asignatura pendiente que tenia el partido con la sociedad.
La limitación de mandato, era algo demandado y exigido por
los ciudadanos a la clase política, la reforma de la Ley
Electoral es muy prioritaria, llega con algunos años de
retraso paro que sea bien venida para seguir desarrollando
las libertades y la democracia de nuestro país. Para
finalizar el nuevo sistema de elección de candidatos en el
Partido Popular, es algo demandado por los militantes del
partido, buscando la regeneración y darle mas participación
a los miles de afiliados, que en los últimos tiempos se han
visto excluidos de la toma de decisiones en el seno del
Partido Popular. Grandes y acertadas medidas para un tiempo
nuevo y para un Partido Popular en regeneración tanto de
personas como de democracia interna.
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OPINIÓN
/
COLABORACION
