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El presidente Vivas ha dejado
aparcada por unos días la política local para viajar hasta
Madrid, participando el pasado jueves en la Conferencia
Política x el Futuro de España, organizada por el PP, donde
coincidió con pesos pesados del partido como Arenas,
González Pons, los ministros García Margallo y de Guindos,
Esperanza Aguirre y Álvaro Nadal, volviendo a realizar una
defensa de nuestra ciudad, afirmando que “en Ceuta no
rechazamos otras creencias”, pero “sí rechazamos todos,
cristianos, musulmanes, hebreos e hindúes, la utilización de
la religión para sembrar el odio y el fanatismo”.
Además, en el día de ayer se
reunió con el ministro de Hacienda Cristóbal Montoro,
dejando patente la buena labor que Vivas está realizando en
sus gestiones con el Estado y el apoyo del Gobierno de Rajoy
a nuestra ciudad, evidenciando, con absoluta normalidad, la
integración de Ceuta en la estructura autonómica del Estado.
Y lo más importante es que ese respaldo a Ceuta del Gobierno
del PP se concreta en decisiones políticas vitales para
nuestra ciudad. La mejor y más contundente prueba -como
reitera Vivas en mucha ocasiones-, es el trato especial que,
bajo la dirección e impulso del presidente Rajoy, nuestra
ciudad ha recibido en estos duros, difíciles y exigentes
años, los más duros y exigentes de nuestra historia
reciente.
En este sentido, conseguir
que las transferencias que recibe Ceuta a través de
convenios que sirven para hacer frente a situaciones
estructurales puedan tener una norma que los ampare, de modo
que no dependan de las decisiones políticas que puedan
tomarse cada año a la hora de la aprobación de los
correspondientes Presupuestos, sería un logro espectacular
del presidente Vivas y fundamental para la estabilidad de
Ceuta.
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OPINIÓN / EDITORIAL
