PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura
Melilla

Opinión
Archivo
 

 

 

sociedad - LUNES, 13 DE JULIO DE 2015


la doctora Moskal en etiopía . cedida.

MEDICINA / ESTANCIA DE UNA PEDIATRA EN ÁFRICA
 

Una experiencia inolvidable

La pediatra polaca residente en Ceuta Margarita Moskal ha realizado un Máster de Enfermedades Tropicales en Etiopía y destaca que lo que más le ha impactado son los niños con desnutrición severa
 

CEUTA
Luis Corbacho

ceuta
@elpueblodeceuta.com

Una experiencia “muy interesante e inolvidable”. Así define Margarita Moskal el mes que ha pasado en Etiopía como parte de su formación del Máster de Enfermedades Tropicales. Moskal, ciudadana polaca que lleva ocho años en el Hospital Universitario de Ingesa de Ceuta, atendió a EL PUEBLO.

Para la pediatra este mes pasado en Etiopía ha sido “una experiencia inolvidable como médico, como persona y también en el aspecto espiritual”. La profesional sanitaria trabajó en un hospital rural en el sur del país, a 260 kilómetros de la capital, Adis Abeba. El centro sanitario es gestionado por una misión católica.

Gracias al máster ha tenido ocasión de ver cómo funcionan estos hospitales, su forma de atender a los pacientes o el personal del que disponen. El principal problema sanitario con el que se encontró es la desnutrición severa de niños “de 15 o 18 meses y de dos años. Debido a su estado la nutrición tenía que ser con sondas nasogástricas. No podían tomar nada por la boca porque están muy débiles”.

Lo más impactante de su estancia en Etiopía fue encontrarse con una habitación llena de niños “que no reaccionaban, parecían zombies. El primer caso de desnutrición severa me impactó”. Una de las características de su grave estado por falta de nutrición es que les cambia el color del pelo. En Europa “puede haber casos de desnutrición, pero no afectan de esa manera”.

Esta situación supone “una alegría cuando ves que el niño está mejorado, reacciona y sonríe como un niño de verdad”. La mayor satisfacción como pediatra y como persona es ver que los niños con desnutrición severa empiezan a recuperarse.

Los pacientes tienen que pagar por las consultas y por los ingresos. “La sanidad en Etiopía es de pago, da igual que sea un hospital público o un centro privado”, expone Moskal. En todo caso el hospital rural en que ella trabajó tenía los precios más bajos.

Una curiosidad es que los pacientes etíopes “prefieren a médicos extranjeros”. En el centro había varios médicos: un pediatra con 16 años de experiencia en el hospital rural, un médico general y una cirujana, todos ellos etíopes. También hay un médico holandés que trabaja como ginecólogo. Con respecto a la figura del enfermero no es muy común en Etiopía, en su lugar lo que abunda son los asistentes.

El turno de trabajo es de 8 de la mañana a 18 horas. En todo caso “si pasa algo urgente se atiende en otro horario”.

El máster realizado es por la Universidad Autónoma de Madrid. A Moskal le gustaría continuar con este trabajo.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto