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Tras el cierre de los colegios,
los comedores escolares llevan dos semanas funcionando a
cargo de la Ciudad Autónoma y lo hacen de forma
satisfactoria, según matizó ayer el portavoz del Ejecutivo,
Jacob Hachuel tras el Consejo de Gobierno. Tras comenzar con
en torno a 160 menores, la cifra ha ido creciendo y ahora
377 niños ya están disfrutando de la beca de comedor que ha
puesto en marcha la Ciudad. No obstante, la lista de
beneficiarios definitiva aún no está cerrada ya que se
espera que la cifra aumente después del Ramadán y así lo
trasladó ayer Hachuel. “Esta previsto que no haya ningún
déficit”, apuntó el portavoz para recordar que están
funcionando los comedores de siete centros además de San
Antonio, a donde se está prestando el servicio a través de
un catering.
A principios de junio, la
Ciudada apuntaba que se podría atender a unos 1.000
escolares en los comedores durante el verano. El coste por
día y niño, según trasladó la consejera de Asuntos Sociales
la semana pasada es de 4,65 euros. Un precio en el que
también se incluye la merienda que se da a los menores para
que se la lleven a sus casas.
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solidaridad
