Todos los años, cuando desde la Dirección Provincial del
MECD se abre el plazo de matriculación, este proceso termina
con muchas familias mostrando su rechazo a los criterios
esgrimidos por el MECD para finalmente designar el centro a
sus hijos y que ninguno de ellos coinciden con las
preferencias reflejadas en la solicitud presentada.
Ante esta situación, son muchas las familias que presentan
recurso tras recurso que al final no llega a nada y ese es
el caso de Hassana B.O., una madre de un pequeños de tres
años, casada y con domicilio en la zona de Hadú, que ha
visto como su hijo, tras la resolución de la Comisión de
Garantías, ha sido escolarizado en el Colegio Público José
Acosta, y no en los que había referenciado en su solicitud.
En un escrito que ha hecho llegar a la Dirección Provincial
del MECD, esta mujer denuncia como ha venido observando
desde hace tiempo cómo padres de alumnos de todos los
colegios de esta ciudad, cruzan a diario desde Marruecos por
la frontera del Tarajal, “sin que la Dirección Provincial ni
la Ciudad Autónoma, hagan nada para solucionarlo”,
manifestando que se puede constatar cómo a diario cientos de
vehículos cruzan la frontera con sus hijos para dejarlos en
los diferentes centros escolares, de lo que incluso esta
mujer, tal y como pudo comprobar este diario, tiene bastante
documentación gráfica al respecto.
Esta queja viene motivada porque a su hijo se le ha asignado
el Colegio Público José Acosta, que es el que más lejos está
de su vivienda y no ninguno de los solicitados por ella,
donde también se encontraba el Colegio Concertado Severo
Ochoa.
Sobre esta cuestión asegura que, pese a preguntarlo,
desconoce a día de hoy “a qué criterios y bases se ciñe la
Comisión de Garantía para designar los centros”,
preguntándose “qué oscuros intereses tiene la Dirección
Provincial para hacer lo que hace”.
En este sentido Hassana no entiende porqué los inspectores
de la Dirección Provincial no hacen nada al respecto y
porqué la Ciudad Autónoma no pone remedio a este “atropello
sistemático, alargado en el tiempo, y que cuenta con el
beneplácito de la Dirección Provincial”, recordando además
que son muchos los padres y madres que pagan sus impuestos
religiosamente en esta ciudad y sin embargo tienen que
soportar “estas arbitrariedades de estos dirigentes y
supuestos educadors de esta ciudad”.
La madre manifiesta que sus derechos como ciudadana
residente en Ceuta, “son conculcados, además de ver como la
Dirección Provincial del MECD discrimina totalmente a mi
hijo, rayando en la parcialidad e incluso en el racismo puro
y duro”.
En este sentido, Hassana denuncia que los padres y madres de
los alumnos se están viendo obligados a “sopoertar el trato
degradante, insultante y reaccionario del señor director
provincial, ya que a todos estos defraudadores que viven en
Marruecos, le dan becas para libros y para comedor, y un
etcétera muy largo, cosa que mi hijo no tiene derecho por
tener su padre una nómina”.
Igualmente, también denuncia el silencio y la falta de
actuación ante esta situación por parte de la Ciudad
Autónoma y de la Delegación del Gobierno, que “pese a
conocer esta situación no hacen nada”.
Por último, la madre del pequeño reconocía a EL PUEBLO
reconocía que nadie le va a responder a esta situación y que
lamentablemente todo va a continuar como hasta ahora “porque
sinceramente les interesa así”.
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