Juan Vivas puso ayer en manos de la Virgen de África su
mandato después de recibir el bastón de mando. El
presidente, tras jurar su cargo en el Salón del Trono del
Palacio Autonómico, se dirigió a la Iglesia de África para
cumplir con el tradicional ofrecimiento y llevar este bastón
de mando a la Alcaldesa Perpetua de Ceuta. Un acto en el que
estuvo arropado también por la vicepresidenta del Gobierno,
Soraya Sáenz de Santamaría, y parte de sus compañeros de
partido, o nuevo el delegado del Gobierno, Nicolás Fernández
Cucurull.
El vicario de Ceuta, Juan José Mateos, dirigió esta ofrenda
en la que pidió también por los responsables del futuro de
la Ciudad para que medien y hagan valer la libertad
religiosa, así como la convivencia en paz de los ciudadanos
de las distintas religiones que viven en la ciudad. Mateos
alertó de que es urgente y necesario un cambio radical en el
comportamiento de la sociedad, así como que hay que
acompañar el progreso científico y tecnológico del progreso
moral.
Visita al camarín
Por último, Mateos deseó que en esta nueva etapa a nadie le
falte lo necesario para vivir y también tuvo un recuerdo
para los fallecidos, entre ellos, Francisco Antonio González
Pérez. “Pedimos que Ceuta siga siendo un lugar de encuentro
de culturas”, concluyó.
A continuación, Vivas entregó el bastón de mando a la Virgen
de África e inmortalizó el momento junto a la Patrona, en su
camarín, acompañado también por Sáenz de Santamaría. Ambos
firmaron en el libro de la Cofradía, antes de fotografiarse
con parte de sus miembros.
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