Buenos días, gente:
Entro otra vez en mi ventana, de nuevo con Vds., después de
un lapsus bastante largo motivado por razones que no vienen
al caso.
Vayamos ahora a comentar sobre el cambio que ha realizado
Mariano Rajoy Brey en el PP de cara a las próximas
elecciones de noviembre.
En primer lugar, me alegro –ya sé que algunos de ustedes no-
de que el lenguaraz y nefasto político extremeño Carlos
Javier Floriano Corrales (48) haya sido apartado. Ya lo
esperaba desde hace tiempo, porque su estampa y sus
declaraciones carcomía al partido por completo.
En segundo lugar, los supuestos cambios que ha hecho el
presidente del PP sólo afectan al personal del mismo
partido, no a los ciudadanos, ya que la política que realiza
sigue siendo la misma.
Creo que el PP seguirá teniendo un problema grande porque
creo que la mayoría absoluta, que goza actualmente, es algo
coyuntural y que ellos, los del PP, piensan que es una
mayoría ideológica basándose en que los españoles se habían
vuelto fachas, por culpa de las supuestas tonterías de los
socialistas en la anterior legislatura.
Entra dentro de las clasificaciones de errores, el total
desprecio de que hacen gala contra partidos emergentes
(Podemos, Ciudadanos), sin darse cuenta que ellos mismos,
los peperos, que estos partidos, sobretodo Podemos, se
alimentan de ciudadanos desesperados.
Unos por caer en la pobreza más o menos extrema, otros por
los desahucios y en solidaridad con los desahuciados, otros
por las condiciones de esclavitud en que se ha convert6ido
el mercado laboral y otros por la enorme corrupción dentro
de las filas del PP y la nula actuación de la Justicia en
profundidad.
El propio PP es el mayor productor de pobres, desahuciados y
desesperados que puede existir. Ese es el gran problema que,
aunque digan que mejoraran su política, seguirá siendo un
gran problema para ellos y sus aspiraciones de perpetuarse
en el poder.
Veo raro que sigan confiando, los peperos, en gente
imputada. El ex presidente de la Diputación de Zamora, ahora
vicesecretario de Organización del PP, Fernando Martínez
Maillo (46), está bajo investigación por un caso de
administración leal, ¡vamos! en otras palabras: corrupción,
cuando formaba parte del Consejo de Administración de Caja
España… estoy viendo a los líderes de la izquierda
frotándose las manos con una sonrisa de oreja a oreja.
Ahora entro de lleno en la pregunta, razón de este artículo,
que suelto para ver si alguien me da una respuesta justa y
totalmente democrática: ¿Por qué tratáis de distinta manera
las declaraciones de uno de izquierdas comparadas con las de
uno de derechas y del PP además?
Lo pregunto por el trato que se ha dado a un concejal de
Ahora Madrid, recién elegido, por sus declaraciones de hace
cuatro años, que pueden ser tachadas como ‘locuras de
juventud’, y el trato que están dando a otro joven que
aparece demasiado por las televisiones como el sucedáneo de
la derecha de otro de izquierdas, pero al que no se le puede
defender por ‘sus locuras de juventud’ por ser ahora cuando
las hace.
Me estoy refiriendo al trato entre Guillermo Zapata Romero
(36) y Pablo Casado Blanco (34). El palentino ha soltado
tantas lindezas, iguales o peores que el madrileño guionista
de televisión, y sin embargo lo aúpan a la vicesecretaría de
Comunicación del PP.
Por no seguir escribiendo sobre otros, porque es demasiada
larga la lista de corruptos que sería inacabable el
artículo, aunque menciono a los alaveses Alfonso Alonso
Aranegui (48) y Javier Ignacio Maroto Aranzábal (43),
condenados por el Tribunal de Cuentas….
En fin, la vida sigue y yo también, no entendiendo aún cómo
entienden algunos ciudadanos la política corrupta como la
mejor para gobernarnos.
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