El PSOE de Ceuta ha instado a la
Ciudad a que los comedores escolares faciliten la
conciliación laboral a las familias, tras mantener
conversaciones con varias personas afectadas que “no saben
qué hacer con sus hijos e hijas en los meses que cierran los
colegios”. Afortunadamente, a estas alturas del siglo XXI,
creemos que nadie cuestiona ya que la escuela tiene que
estar al servicio de la comunidad y que debe responder a las
demandas de la sociedad, priorizando los intereses del
alumnado, siendo obligación de los servicios públicos, y la
educación lo es, dar una respuesta a esas nuevas necesidades
sociales.
Y una de esas nuevas necesidades es el servicio de comedor,
que es también un tiempo y un espacio educativo, en el que
se aprenden normas y pautas educativas saludables
relacionadas con la comida, a la vez que se ofrece una
alternativa a nuestra conciliación laboral y familiar.
Decimos bien, conciliación, que no es lo mismo que dejación
de responsabilidades como parecen empeñados en atribuir a
las familias algunos sectores. Con una visión global de
nuestro panorama social es fácil entender la necesidad que
las familias ceutíes tienen de poder disponer de comedores
que reúnan condiciones óptimas en cuanto a espacio, tiempo,
calidad y servicio en general. Hemos avanzado en poder
disponer de este servicio no solo los meses de septiembre y
junio, sino también en los meses de verano y en tener menús
adaptados a necesidades específicas de la población escolar,
por lo que no estaría nada mal comenzar a desarrollar
políticas complementarias de apoyo a la conciliación de la
vida personal y familiar y de fomento de la equidad
educativa y de la igualdad de oportunidades.
|