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El gerente del Hospital
Universitario, Justo Ostalé, una vez que salía a la luz
pública el fallecimiento de un bebé por una presunta
negligencia médica de la ginecóloga que estuvo de servicio
durante la pasada madrugada del lunes, atendía a EL PUEBLO
de Ceuta para reiterar, esta vez de forma pública, todo su
apoyo y respaldo a la familia del neonato fallecido, y para
aclarar que desde el mismo instante en que se produjo esta
situación “el Ingesa abrió una investigación interna, la
cual lleva un proceso, con el fin de esclarecer exactamente
que fue lo que ocurrió durante el parto”.
De momento y hasta que no se
conozcan todas las versiones, se estudien bien los informes
realizados y se esclarezca sin duda alguna todo este asunto,
la ginecóloga que presuntamente por su mala praxis provocó
la muerte del pequeño ha quedado apartada del servicio, tal
y como así lo confirmaba el gerente del Hospital.
“Se viene comentando que sobre la
ginecóloga pesan numerosas denuncias, pero debo decir que
oficialmente no existe ninguna denuncia, si quizás quejas
verbales, pero con eso no se puede tomar ninguna medida. Es
ahora cuando encima de la mesa ya existe una denuncia
formal, presentada a raíz de este trágico suceso, y es ahora
cuando ya se puede comenzar a actuar o al menos tomar
medidas cautelares, como así se ha hecho, hasta que se
esclarezca lo que ocurrió”, resaltaba Ostalé, quien también
se lamentaba de la prontitud con la que la familia ha
decidido enterrar al bebé, ya que considera que el pequeño
debería haber sido sometido a una autopsia, la cual habría
desvelado con total certeza lo que realmente ocurrió durante
el parto.
En cuanto a la posibles acciones
legales que la familia del pequeño pueda llevar a cabo
contra la ginecóloga, el gerente del Hospital se sinceró con
EL PUEBLO y reconoció que toda la dirección del Ingesa
colaborará con la familia en lo que haga falta, indicando
que esta postura ya se la trasladó al padre y la tía del
pequeño, manifestando que están en todo su derecho de
judicializar el asunto si consideran que se ha producido una
negligencia médica, asegurando que él lo haría. Ostalé
también ha recordado que la investigación interna abierta
por el Ingesa requiere un proceso, que quizás en estos casos
se desea que sea más ágil, pero que al tratarse de un asunto
tan delicado es necesario ir con cuidado y estudiando con
detenimiento todo lo que se recogen en los informes
presentados por todo el personal que estuvo de servicio y
asistiendo el parto.
En cuanto a la ginecóloga
que por su presunta mala praxis provocó la muerte del bebé,
este diario ha podido saber que el año pasado solicitó un
prórroga de su contrato tras cumplir 65 años y mostrar su
deseo de continuar trabajando en el Servicio de Ginecología
del Hospital Universitario. Esta prórroga le fue concedida
por tan sólo un año y que la misma se cumple el próximo mes
de agosto, situación que unida a este trágico suceso podría
provocar la jubilación definitiva de la facultativo, aunque
desde la dirección del Ingesa se ha resaltado que no se
puede avanzar nada sobre este asunto ya que el proceso
interno sigue abierto, todavía no hay nada concluyente, y si
lo hubiera la última decisión se toma desde Madrid.
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