Todas las ponencias fueron interesantes y muy vinculadas con
Ceuta, pero la que más expectación levantó fue la ofrecida
por el presidente de la Audiencia Nacional, José Ramón
Navarro Miranda. Bajo el título ‘La Audiencia Nacional y los
delitos terroristas: Perspectivas actuales y de futuro’,
Navarro Miranda hizo un recorrido por el organigrama de la
Audiencia Nacional desde su creación, hasta finalmente
centrarse en cómo se trabaja en la actualidad,
jurídicamente, contra el nuevo terrorismo islámico.
Navarro Miranda destacaba a los presentes que la Audiencia
Nacional, que acaba de cumplir 38, es mucho más que esos
seis escalones que suben y bajan los jueces que salen en
televisión, y puso en antecedente a los asistentes del por
qué, cómo y cuando nace la Audiencia Nacional, para
posteriormente resaltar el futuro y el presente de este
órgano judicial.
El presidente de la Audiencia Nacional resaltaba que es el
único tribunal creado de nueva planta en los últimos
decenios, a la vez que aclaraba que el delito de terrorismo
no se incorpora dentro de del decreto ley que constituye la
Audiencia Nacional así como que Audiencia Nacional nace por
y para la democracia, lo que la ha llevado a ser modelo en
muchos países y en muchos ordenamientos jurídicos de derecho
comparado.
Centrado en el ámbito del terrorismo, Navarro Miranda
manifestaba que fue a partir de 2011 cuando España y los
organismos internacionales empiezan a establecer una serie
de decisiones marco que provoca un cambio radical la forma
de trabajar y regular la lucha contra el terrorismo.
En este sentido, Navarro Miranda resaltaba que actualmente
en la Audiencia Nacional se han identificado 1.163 víctimas
mortales del terrorismo y se han identificado 675 causas
judiciales
Navarro ha trazado la evolución histórica de las
manifestaciones violentas desde el terrorismo clásico hasta
las nuevas formas de barbarie encarnadas por organizaciones
como Daesh o Al-Qaeda, detallando igualmente que los
actuales fenómenos terroristas ya no encuentran en el
principio de jerarquía uno de sus fundamentos, tal y como
sucedía con las bandas que actuaron en décadas pasadas sobre
territorio europeo. La estructura de estas organizaciones
terroristas ya no reclama como antaño una jerarquización en
la toma de decisiones, sino que dejan espacio al activismo
autónomo, a los conocidos como “lobos solitarios”.
En ese nuevo contexto, el presidente de la Audiencia
Nacional se ha congratulado por el “alto” nivel de consenso
parlamentario que recibió la reforma del Código Penal que
entrará en vigor el próximo 1 de julio, que entre otras
cosas “permite adelantar la barrer penal frente al
adoctrinamiento pasivo, ante aquellas personas que entren en
Internet en busca de esas páginas yihadistas, o frente a
quienes viajan al extranjero para practicar la supuesta
yihad”.
Durante su comparecencia, el presidente de la Audiencia
Nacional ha destacado con rotundidad que “Internet es
la gran arma del terrorismo yihadista” y ha cifrado en “unas
30.000” el número de páginas web con contenido de esa
naturaleza, una amenaza que según ha destacado se debe
combatir “por la vía de la cooperación internacional, sobre
la que todos los países están sensibilizados tanto en la
vertiente de los ‘lobos o lobas solitarios’ como en la
financiera, la de la palabra y la del odio al enemigo”.
El presidente de la Audiencia Nacional ha dividido en cuatro
tipos la yihad. La primera de ella sería el yihadismo ‘lobo
solitario’ y en la que se pone en peligro la propia vida del
agente terrorista actuante; el yihadismo que busca el apoyo
financiero y material; el yihadismo mediante la palabra
siendo este donde entra y toma cuerpo la propaganda por
internet para la captación; el yihadismo del odio al enemigo
con el que se pretende extender el califato por todos los
sitios en que pretende Daesh situarse.
El magistrado también ha llamado la atención sobre los
“nuevos fenómenos de captación de mujeres y menores”, un
ámbito en el que el Juzgado específico de la Audiencia está
tramitando 13 expedientes de reforma por enaltecimiento y
humillación y otros 5 por delitos de terrorismo yihadista,
aunque en el campo de quienes aún no han cumplido los 18
años ha instado al poder legislativo a “ordenar” las
competencias jurisdiccionales para evitar las “disfunciones”
actuales.
Finalmente, el juez citaba la nueva Ley Orgánica 2/1015 en
materia de delitos de terrorismo, que entrará en vigor el
próximo 1 de julio, y que ofrece armas legales al Estado
para combatir no sólo los actos de violencia mismos sino
también los fenómenos previos de captación y adoctrinamiento
en el odio y el adiestramiento. Esta ley, según ha precisado
Navarro, será la que permita perseguir a quienes consulten
páginas yihadistas con la finalidad de unirse a una
organización terrorista o perseguir sus propósitos. “Se
siguen persiguiendo la integración y pertenencia a banda
armada, la colaboración, el adoctrinamiento pero también se
afrontan este nuevo fenómeno, que se conoce como
adoctrinamiento pasivo”, ha concluído.
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