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Los 46 puertos de titularidad estatal transportaron
117.559.612 toneladas de mercancías durante el primer
trimestre de 2015, un 2,8% más que en el mismo periodo del
año anterior.
Esta subida se produjo tras cinco trimestre seguidos de
aumentos en el tráfico portuario, lo que refleja que se está
“recuperando el ritmo de actividad previo a la crisis”,
según indica Puertos del Estado por medio de un comunicado.
El aumento se debió, principalmente, al tráfico de los
graneles líquidos (es decir, productos petrolíferos y
petroquímicos y gas natural licuado), que rozó los 40
millones de toneladas manipuladas, con un aumento del 6,7%.
También tuvieron peso los graneles sólidos (cemento y
carbón), cuyo tráfico aumentó un 3,5%, hasta 21,8 millones
de toneladas. No obstante, la mercancía general continúa
siendo la forma de presentación más numerosa en los tráficos
portuarios y se mantuvo en niveles muy similares al año
anterior, al experimentar un incremento del 0,22%, hasta
52,6 millones de toneladas.
Las mercancías en tránsito superaron los 28,7 millones de
toneladas, con un crecimiento del 3,3%, lo que significa que
una cuarta parte de las mercancías que transitan por los
puertos españoles utilizaron la Península Ibérica como
plataforma para su posterior redistribución a otros países.
En este apartado, se situó a la cabeza el puerto de la Bahía
de Algeciras (14,3 millones de toneladas transportadas),
seguido por el de Valencia (8,2 millones de toneladas), el
de Barcelona (1,6 millones de toneladas) y el de Tarragona
(1,4 millones).
El tráfico ‘ro-ro’ (es decir, los camiones con mercancías
embarcados a bordo de buques) aumentó un 3,8%, con 11,8
millones de toneladas transportadas. Este apartado estuvo
liderado por el puerto de Barcelona (2,2 millones de
toneladas, un 1,1% más), el de Valencia (2 millones de
toneladas, un 16,2% más) y el de Algeciras (1,8 millones de
toneladas, un 0,5% más).
En la Península, destacaron el puerto de la Bahía de
Algeciras, con 918.000 personas transportadas, y su conexión
con Ceuta (383.000 personas), mientras que Barcelona
trasladó a 377.000 personas. Los pasajeros de crucero se
mantuvieron en 1,3 millones, con un ligero descenso del
1,8%.
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