El PP se financia en B desde su fundación (la verdad es que
más parece una organización mafiosa o una cueva de ladrones
que un partido político)
Para muchos de sus votantes imagino que habrá sido como un
despertar de la inocencia. Se habrán sentido -sigo
imaginando- defraudados; y el que no, debería hacerse
revisar por un buen psiquiatra o un buen sacerdote porque o
su psique o su moral no andan finos.
En realidad, hace ya tiempo que tendrían que haber
experimentado ese despertar de la inocencia. El goteo
constante y diario de casos y más casos de corrupción y
sinvergonzonerías del PP ya tendría que haber hecho mella en
la conciencia política -y electoral- de estos ciudadanos. El
homo corruptus existe más allá del PP -¡qué duda cabe!-
pero, desde luego, la mayoría parece que se ha empadronado
en este partido.
Si unimos su catadura moral a las nefastas políticas
económicas y sociales que hemos padecido la inmensa mayoría
de los españoles en estos años, ya tendríamos que tener
claro el sentido de nuestro voto en las próximas elecciones
generales (“blanco y en botella”)
¿Y en las municipales? Pues también parece claro que es
blanco y está en una botella. Sólo hay que recordar que el
Sr. Vivas es del PP, que el PP ya ha tenido sus propios
imputados y, lo más grave para mí, las políticas
implementadas por el Sr. Vivas y el PP han dejado a Ceuta
hecha unos zorros. Vivas ha gobernado para una privilegiada
minoría y esa forma de gobernar, egoísta e irresponsable, ha
girado una impagable factura a la ciudadanía en forma de
grave fractura social, de consecuencias impredecibles.
Una minoría escandalosamente privilegiada y una mayoría
rozando la indigencia, esas son las cartas de presentación
del PP en Ceuta. Bueno, pues si a pesar de que está claro
cuál debería ser el sentido de nuestro voto -en función del
comportamiento ético-político de los que nos gobiernan-,
resulta que el PP vuelve a obtener mayoría absoluta en
Ceuta, tenemos que llegar a la conclusión de que una parte
de nuestra sociedad está enferma, muy enferma, éticamente
enferma porque esa parte de la sociedad está siendo cómplice
de esa ralea de políticos que roban a manos llenas, que
gobiernan para los suyos y que les importa un bledo el resto
de la humanidad.
Y ya perdimos la inocencia. Ya no tenemos excusa. Ya no
podemos decir “yo no sabía quiénes eran, en realidad” o “no
sabía que era esto lo que iban a hacer”. Ya no cuela, amigo…
vecino, ciudadano. Sencillamente, seremos cómplices -y en el
mismo grado de nocturnidad, premeditación y alevosía- porque
con nuestro voto les estaremos diciendo: “sigan con lo que
traían entre manos (que no es otra cosa que maletines llenos
de billetes) Sigan desmantelando el estado del bienestar,
sigan privatizando la sanidad, la educación, sigan regalando
las empresas públicas a los amiguetes, sigan con sus
políticas antisociales que arrojan a buena parte del país (y
a una todavía mayor parte en Ceuta) a la cuneta. Sigan,
sigan…”
* Izquierda Unida-Ceuta
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