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No van muy separadas unas
cuestiones y las acciones de los otros, y en estos días,
especialmente, para aquellos que siguen de cerca y con todo
interés lo que se cuece en los partidos políticos, la
aparición de una de esas encuestas le pone al borde del
infarto a más de uno, o hace que pongan “ a parir” a ese
asesor de imagen, si las cosas no están saliendo como debían
o como se esperaba, para su pupilo, que parecía que iba a
barrer, desde el primer día.
El mes de mayo, que todos los años ha estado muy movido,
especialmente, los fines de semana con las comuniones de los
chavalines, comuniones que unen, durante todo un día, a tres
generaciones, abuelos, padres e hijos, de una semana gozosa,
este año el mes de mayo va a tener otro colorido, mejor
dicho, lo está teniendo ya con las primeras , aunque sea
anticipándose, pegadas de las fotos de los primeros espadas
que concurren a las elecciones.
Ya hay algunas de esas fotos pegadas, en los lugares más
estratégicos, y ya, desde las cercanías de esos líderes, se
ha empezado a fruncir el ceño, cuando la foto en cuestión no
es la que más favorece al candidato, a tono con el slogan
que va marcando.
Estar de acuerdo, en esto, es complicado y si ante esa
diversidad de opiniones salen los resultados de las
encuestas y te has quedado estancado, mal, pero si has
bajado dos décimas ya tenemos “el 2 de mayo” en casa.
Es natural, está en juego mucho, se habla de prestigio, se
habla del partido y, aunque se piensa, no parece oportuno
hablar de las ganancias de los que están metidos “en la
carrera de la política”.
Cada voto vale mucho, más de lo que uno puede pensar, a las
primeras de cambio, y es que los que sacan esas mayorías,
además de estar en el primer plano, local, autonómico o
nacional, están en condiciones de acrecentar su clientela,
con esos puestos que, graciablemente, pueden ir dando a los
que “pegan carteles”, o a los parientes que no sirven para
casi nada y así se van haciendo los representantes de los
más inútiles, aunque parezca que son alguien ahí en ese
cargo.
Ceuta, querámoslo o no, tiene un plus especial que no tienen
ni Algeciras, ni el Puerto de Santa María, porque aquí el
Ayuntamiento es algo más que un ayuntamiento al uso, de
cualquier otra parte, y ese algo más hace que los que logran
un escaño, si además forman parte del Gobierno, tengan casi
asegurado ya, para unos cuantos años, “el modus vivendi”,
mejor que si hubieran ganado unas oposiciones de las de
verdad.
Hasta ahora, hemos visto mucho desasosiego, en todos y cada
uno de los partidos políticos, pero muy especialmente, en el
PP, que sigue sin tener claro, hasta donde puede llegar el
día 24 y, muy especialmente, cuando hay grupos como
Ciudadanos que van calando, con fuerza, en puestos muy bien
vistos, con lo que le van quitando protagonismo a los dos
grandes de siempre, PP y PSOE, además de arrebatarle un buen
trozo de la tarta que se venían repartiendo, desde tiempo
inmemorial, entre ambos.
Cuando salga esta próxima encuesta, aunque está claro que
estará un poco cocinada, con los resultados que aventure, ya
comenzarán nuevos debates, ya más de uno de los que acaban
de aparecer en la foto de uno de esos partidos se mostrará
como un verdadero doctor en políticas, dando mítines, si es
preciso y colocándose al lado del cabeza de lista, para
hacerse así un poquito más grande e interesante. Aquí
dependerá mucho de las encuestas.
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OPINIÓN / EL ESQUINAZO
