El otro día analizamos en el Partido Libre Ceutí una
sorprendente sátira en la viñeta de Álvarez publicada en un
periódico de nuestra ciudad. Concretamente el domingo sobre
las elecciones que se avecinan, y nos quedamos sorprendidos
de la profundidad de su ironía. Ya que siempre hemos
admirado la ironía, considerándola un arte de gran ingenio e
inteligencia. Sobre todo cuando se refiere a los asuntos
políticos, ya que en ellos a nadie se ofende personalmente.
Es más… existe una relación esencial entre la sátira y la
política en su sentido más amplio.
En esta viñeta se describía un marcado a fuego de ganado con
la divisa de un determinado partido, para que todos supieran
quienes pertenecían a su rebaño personal. Era casi…casi...
¡La fiesta de los tontos! ¡Terrible!, porque la sátira es ni
más ni menos no solo una forma corriente de literatura, sino
que pretende influir en la conducta pública… ¡Vamos que es
la parte más política de la literatura!
Y esto nos hizo pensar en el Partido Libre Ceutí, no solo en
la magnifica inteligencia del autor, sino en el mensaje que
con ella se nos transmitía. Y esto es bueno, porque todos
los sistemas sociales y legales están siempre necesitados de
continua reforma, y quizás…quizás…sea esta una de las pocas
formas de conseguir la reforma de los sistemas políticos
afincados. Es decir...cambiar en nuestra casa y nacion el
bunquerizado bipartidismo que sufrimos.
También, hay que reconocer el valor personal de los autores
de la necesaria sátira, porque sabemos que se enfrentaran a
los déspotas y soberbios, a quienes les disgusta cualquier
tipo de critica. Y tienen razón, ya que nunca saben en que
desembocará; y en un ambiente intolerante en los gobiernos
de dominio de los demás mediante el clientelismo político,
la sátira la consideran subversiva del buen orden y moral
que ellos intentan imponer de arriba abajo. ¡En
conclusión…Una subversión a sus valores y categorías
personales! Por ello, desde nuestro Partido Libre Ceutí,
nuestra admiración a dichos valientes.
A nosotros nos hizo pensar en la reinterpretación
autoritaria del carisma que algunos creen poseer. Porque,
aunque sabemos que el Partido Libre Ceutí es el pobre de
estas elecciones y siempre hemos opinado que la autoridad
carismática descansa totalmente en su reconocimiento por
parte de los seguidores. ¡Es lo que se reconoce como
legitimidad democrática! Ósea, que alguien solo se convierte
en líder por la voluntad de sus seguidores, nunca por su
propia voluntad, como ahora sucede.
De esta manera, nunca podrá ser carismática la persona que
utiliza su poder para comprar y marcar a sus
correligionarios sujetándolos bien a unas prebendas
económicas o sociales que el mismo tiene capacidad de
otorgar, o bien a quitárselas o no dárselas. Es decir…que en
sus actos se manifiesta la máxima de que o… ¡Yo o la
anarquía! ¡Que triste! Pero eso parece ser que es lo que
esta pasando y que están mostrando aquellos que mantienen
durante mucho tiempo el poder económico de nuestra sociedad.
Esto es lo que esta sucediendo en muchos lugares de nuestra
nación y que no se salva ni nuestra ciudad… ¿O no piensan
muchos de esta manera? ¿Creen que no existe actualmente una
dominación plebiscitaria de los partidos grandes sobre los
ciudadanos? Es la dominación patriarcal, que acabando con lo
que conocemos como servicio publico en el que el líder se
convierte en servidor de los ciudadanos, se transforma en un
dispensador de promesas y económicas sujetas a su decisión
unilateral. Pero... ¿Queremos seguir considerando líder a
aquel o aquellos que manejan mas intensamente los medios
propagandísticos?
Desde el partido Libre Ceutí, como proyecto social del
ciudadano y para el ciudadano, no queremos este tipo de
líderes que buscan la creación de intereses económicos, que
vayan unidos a ellos como única fuente su legalidad. Somos
un partido pobre y para los pobres, pero aun careciendo de
economía suficiente para marcar votos electorales, queremos
concienciar a todos de la necesidad de un gobierno que
busque el bienestar de todos y que las casas de nuestros
vecinos sean estables todos los días. Como en su día lucho y
muchas veces consiguió dentro de sus posibilidades Pedro
Gordillo Duran. Y además, queremos dar soluciones desde
nuestra casa para nuestra casa, no esperar soluciones de
fuera para nosotros. ¡Soluciones en las que no participamos!
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