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Iniciada ya la precampaña
electoral, los partidos políticos comienzan a desvelar y a
hacer públicas las propuestas y los planes que luego se
reflejarán en sus programas
Las hay de todos los gustos y colores. Y esto no ha hecho
más que empezar. Ayer, los medios de comunicación nos
convertimos en fedatarios de algunas de ellas y llama la
atención la que desveló el secretario general y candidato a
la Presidencia de la Ciudad por el Partido Socialista Obrero
Español, José Antonio Carracao.
Aprovechando la celebración del Primero de Mayo, que en nada
se parece a los de otros tiempos, el socialista, aparte de
pedirle al presidente que se pronuncie públicamente si tiene
intención de permanecer en el cargo de presidente en el caso
de que sea elegido, dejó bien claro que si su formación
recibe el respaldo de los ceutíes y forma gobierno, sus
integrantes no percibirán la asignación por asistencia a los
plenos, que en la actualidad son de 1.200 euros, por lo que
un consejero de la Asamblea se lleva un buen pellizco todos
los meses, ya que a la cifra mencionada hay que sumarle los
haberes por la condición de máximo responsable de tal o cual
parcela.
Esta propuesta dicha en cualquier otra fecha hubiese, a buen
seguro, tenido su importancia, aunque en el día de ayer, en
el que más de trescientas personas se echaron a la calle
para protestar por el empleo en precario, la promesa de los
socialistas tuvo mayor calado. Se ha de reconocer que la
maniobra de Carracao fue brillante, tanto por el momento
como por el escenario y ahora lo que falta es que se
convierta en realidad.
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OPINIÓN / EDITORIAL
