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Esta es la historia, y no somos muchos ya los que nos
podemos acordar de aquel primero de mayo que, por primera
vez, en nuestras tierras, dejó de ser un día lectivo, al
menos para los que éramos estudiantes, entonces.
Lo recuerdo como si hubiera sido ayer, estábamos esperando,
a la puerta del Colegio, la hora para entrar a clase. Llegó
el conserje, con traje de día de fiesta, y nos dijo:”Hoy no
hay clase, es una fiesta nueva”.
Nos sentó mejor que si nos hubiera dado un “chupa-chups” y
ese día, en vez del partidillo de fútbol de la hora del
recreo, hubo un partidazo que duró toda la mañana.
REGALO DE PÍO XII
Esta fiesta, San José Obrero, nació en el ámbito religioso,
durante el papado de Pío XII, eran los años 57 o 58, creo
que yo estudiaba primero de aquel Bachillerato de seis años,
dos reválidas y preuniversitario. Sí que recuerdo que era un
chavalillo que no acertaba a comprender como de la noche a
la mañana, por muy Papa que fuera el ex cardenal Eugenio
Paccelli, se podía sacar de la manga una fiesta que nos
dejaba sin clase un día, o mejor dicho que nos aumentaba las
vacaciones, a todos los estudiantes, grandes o pequeños, de
aquella época, pero sinceramente no le poníamos reparos a
esa fiesta, mejor fuera, con las ganas que siempre tuvieron
y tuvimos los estudiantes de que llegaran cualquier tipo de
vacaciones.
DE LO ECLESIAL A LO SINDICAL
Y lo que más nos chocaba, a esa edad, a la que no llegaban
más razones que:”esto es lo que hay”, era que mientras aquí,
en la España de antes de los 60, el primero de mayo fuera
día no hábil para la enseñanza, no para la banca o el
comercio en general, y no digamos para las labores de los
agricultores o de los ganaderos, sin embargo, en los países
que aparecían como más civilizados, o en aquellos de los que
no se decía casi nada, porque “no era conveniente” hablar de
ellos, en esos había unos desfiles extraordinarios y más que
fiesta estudiantil era auténtica fiesta de todo el país.
Las pocas televisiones que había, daban, en sus
informativos, reportajes de aquellos desfiles, en los que se
empezaban a ver siglas de las que años más tarde estuvimos
saciados, de la mañana a la noche, siempre con
reivindicaciones, siempre a favor del “trabajador” pero al
que no le llegaba la fiesta en su totalidad.
Se había pasado toda la importancia a lo, meramente,
reivindicativo, incluso en tierras en las que no se podían
hacer, según que tipos de reivindicaciones.
LAS MANIFESTACIONES DE HOY
Tendrán su importancia, no me cabe la menor duda, pero lo
pura y auténticamente sindical, desde hace años, se ha
mezclado con lo político y las reivindicaciones de los
sindicatos de clase, los que más se dejan ver, van de la
mano de ciertos partidos de izquierdas o de pseudo-izquierdas,
como son la Social Democracia, el PSOE, Partido Comunista o
IU.
Por eso son mucho menos fiables estas manifestaciones
reivindicativas, porque cogidos de la mano con partidos que,
también, destruyeron muchos puestos de trabajo, usan o
tratan de usar a unos sindicatos que cada vez están más
lejos de lo que fueron en su origen.
AL MEDIO-DÍA
También en Ceuta, no podía ser menos, como en la mayor parte
de las ciudades españolas, a eso del medio-día comenzará la
manifestación reivindicativa del 1º de mayo.
Parece que, en esta ocasión, el maridaje entre CCOO y UGT es
bueno, en esta ocasión pueden ir cogidos del brazo, no como
en algunas otras ocasiones que han salido cada uno por una
parte, haciendo “la guerra por su cuenta”.
La Plaza de la Constitución será el punto de partida. Es el
centro de la Ceuta de hoy y seguro que llegarán hasta la
Plaza de los Reyes, aunque, en esta ocasión, con la
enfermedad del delegado del Gobierno, no van a tener allí a
quien poderse dirigir con pitos, flautas, protestas,
proclamas o todo el repertorio ese que suele acompañar a las
manifestaciones del primero de mayo.
CONTRA EL EMPLEO PRECARIO
Esta es la llamada de los dos sindicatos de clase y lo que
no podía faltar es que, en estos momentos, Aróstegui que
parece “perro de todas las bodas” saliera con una proclama
suya de que la rebaja fiscal del Gobierno es una moratoria
electoral para seguir con los recortes en el año próximo.
Proclama interesante, pero no va a tono con este instante,
en el que lo básico es la reivindicación sindical no las
otras tareas políticas. Y es que Aróstegui no sabe si está
en la hora de los sindicatos, de la política y mucho menos
de las clases.
Naturalmente, UGT ni puede, ni tiene que, ni quiere quedarse
atrás y su secretario general, Antonio Gil apuntaba algo así
como:”Nos encontramos ante el dilema de aceptar ese empleo
de mala calidad o exigir un cambio de políticas”. Eso si es
de un sindicato y es de suponer que esto debe ir dirigido
tanto al PP, como al PSOE, su hermano gemelo.
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