Fátima, es una ceutí de 23 años, esposa de un joven de
Castillejos que se marchó a Siria, relató ayer a la
conductora del programa ‘Hoy por Hoy’ de la Cadena Ser, que
ayer se realizó desde las instalaciones del Polifuncional
Mustafa Mizzian, Pepa Bueno, la experiencia vivida cuando
decidió marcharse a ese país para convencer a su esposo con
el objetivo de que regresase, hecho que después de seis
meses consiguió.
Con un hijo que aún no tiene los tres años, la joven relató
en el programa radiofónico que nunca pensó que su marido se
había marchado a Siria, reconociendo que en la actualidad se
encuentra detenido la prisión de Fez, la tercera ciudad de
Marruecos después de Casablanca y Rabat.
Ante las preguntas de Pepa Bueno, Fátima reconoció que los
hechos se sucedieron hace dos años, cuando “un día, estando
en casa de mis padres, me di cuenta que llevaba dos días sin
llamar, desaparecido”.
Ante esta situación, según dijo Fátima, lo único que podía
hacer es presentar una denuncia en la Jefatura Superior de
la Policía, lo que hizo, no apareciendo durante dos semanas
y sólo lo hizo “a través de una llamada telefónica y me dijo
que estaba camino de Siria”.
Fátima reconoció que la marcha de su esposo fue algo que
nunca pudo imaginar, “ya que fue una sorpresa total, así
como una decepción bastante grande”.
Fátima llevaba casada ocho años con el joven y decidió
marchar hasta Siria en septiembre, después de que su
compañero sentimental lo hiciese en el mes de marzo. “No fue
fácil pensarlo, pero no había otra opción que la de ir”
hasta ese país con el objetivo de “convencerlo para que
volviese”.
Al igual que su esposo, Fátima tampoco dijo nada a los
suyos, “ya que mis padres no me iban a dejar” ya que si
decía que “me marchaba lo hubieran impedido, y encima con el
niño; era superdifícil”.
La periodista de la Cadena Ser ahondó más en el asunto e
interrogó a Fátima acerca de lo que su marido le contaba,
argumentando que él le transmitió tranquilidad, diciéndolo
que “no tengas miedo, que vengas que yo te voy a cuidar” y
que en Siria la cosas no eran “lo que ves en la tele, y es
lo que era, que no es lo que vemos en la televisión”.
La joven ceutí desconoce a día de hoy los motivos que
condujeron a su marido a marcharse a Siria, según dijo a
preguntas de Pepa Bueno, agregando que le dijo que ella se
fue ejercer “ayuda humanitaria a los niños que mueren, a los
hombres y a las mujeres, a todos”.
Fátima se marchó a Siria acompañada de una amiga, que
también buscaba a su marido, llegando a la ciudad siria de
Alepo y “no la vi como una ciudad en guerra”. “Estábamos en
un sitio a las afueras, donde no había guerra ni nada” y,
además, “nunca he visto nada”.
Fátima reconoció que durante los seis meses que permaneció
en Alepo “nunca nos faltó de nada. Hemos comido y nos hemos
vestido; la verdad que muy bien. Nunca nos faltó de nada y
nos daban el dinero y nos ayudaban”, aparte de que se había
llevado sus ahorros, dijo.
La joven ceutí, en su relato a la Cadena Ser, dejó claro que
su intención no era quedarse en Siria y es por ello que
comenzó a “convencer a su marido desde el minuto uno”,
convenciéndolo al final con argumentos “como el niño y otras
cosas”.
Fátima volvió a ser interrogada acerca de si había visto
escena de guerra, negando que eso fuese así, agregando,
además, que cuando “llegué la verdad es que mi marido no
salía mucho de casa y al final le convencí” para regresar.
La joven reconoció que para regresar tuvieron que huir,
aunque matizó que si contaban sus intenciones de volver “no
te iban a matar como aquí se escucha”, dijo a Pepa Bueno.
Seguramente le convencerían que “no se viniese, aunque
matarlo no lo iban a hacer”.
Pese a todo, Fátima no tuvo problemas a la hora de reconocer
que la salida fue difícil, “ya que teníamos que salir por
una frontera, y eso no es fácil”.
La salida la tuvieron que hacer a pie “y tuvimos que caminar
unos veinte minutos. Fue una caminata bien larga” y, además,
“con el niño en los brazos del padre”.
La amiga que acompañó a Fátima en esta odisea también tuvo
fortuna, logrando que su esposo también regresase después de
haberse marchado también a Siria. “Las dos teníamos el mismo
plan”, aseguró.
Todo el mundo se iba
Aunque no sabe bien porqué se produjo la marcha de su
marido, lo que si dejó claro Fátima es que “en esa época,
hace dos años, todo el mundo iba, el pequeño, el grande,
todo el mundo iba. Desde Ceuta, desde Castillejos, aunque es
algo que no se explica”. En Castillejo, apostilló, de “cada
casa se ha ido uno, y ha vuelto gente, aunque no muchos”.
Por último, Fátima explicó que su marido tenía muy claro que
cuando llegase a Marruecos iba a ser detenido, como así ha
sido y actualmente está preso en la cárcel de Fez.
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La madre de Nawel: “Mi hija fue captada a través del
WhatsApp”
Nawel es una menor ceutí a la que
el pasado viernes la Audiencia Nacional dictó para ella una
condena de dos años en régimen cerrado. En declaraciones
realizadas ayer al programa Hoy por Hoy de la Cadena Ser y
recogidas por este periódico, Fátima, su madre, explicó como
fue captada, diciendo que “lo han cogido como un juego,
porque son crías. Que ella lo mismo decía “bueno, me voy
camino al paraíso”, ¿pero qué paraíso hija, pero a dónde vas
a ir si eres una niña? Mi hija nunca ha salido sin mí, y
menos muy lejos. Y ella nunca ha tenido amigos ni en
Melilla, ni en Nador, ni nada. De repente por WhatsApp, los
que estaban comiéndole la cabeza le decían qué tenía que
poner en el teléfono, a dónde tenía que ir...”
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