“Ofrecer una correcta y completa educación, conseguir su
inclusión y la aceptación sin discriminación” y educar en la
diversidad son cuestiones clave para garantizar la igualdad
de oportunidades de todos, incluidos los tres millones de
personas en España que padecen alguna de las 7.000
enfermedades poco frecuentes. Unas patologías que, en muchos
casos, afectan a niños y adolescentes, por lo que la
accesibilidad plena y adecuada durante el proceso de
aprendizaje cobra especial relevancia. Así lo manifestó ayer
el ministro de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad,
Alfonso Alonso, en su intervención en el II Congreso Escolar
sobre Enfermedades Poco Frecuentes, celebrado en Barcelona.
El ministro reiteró que la mejora del diagnóstico, el
tratamiento y la calidad de vida de los pacientes de estas
patologías es una prioridad en la que se trabaja “de forma
transversal” y también un desafío que se quiere enfrentar
“escuchando a los afectados”. Asimismo explicó que 182
millones de euros del presupuesto del Plan de Acción de la
Estrategia Española de Discapacidad 2014-2016 están
destinados a impulsar la evaluación temprana de las
necesidades educativas de los menores con necesidades
especiales
|